Asalto la vitrina del mutismo,
arañando con garra
el aparador del silencio,
perforando los muros de la calma,
suicidando la estancia de la muerte,
abriendo el pórtico a la vida,
en esta abandonada apatía
que envuelve entre sedas mis días.
Y renazco con ímpetu a mis locuras
nutriendo el iris de tu deseo,
saqueando tu impaciente mirada,
trenzándote besos con mis labios de fuego,
trazándote versos con la sangre de mis venas,
tentándote impune a mis inmorales fantasías.
Galopando en la tempestad,
cincelando la obscenidad,
hidratando la lubricidad,
asediando al infierno,
rompiendo el latido,
alucinando al jadeo.
Y el verbo se hizo carne,
y la carne se deshizo
en la sustancia más líquida
del último suspiro.
Uau! Pleno, en un intenso crescendo hasta el "último suspiro", de cortar el aliento!
ResponderEliminarEnhorabuena, me encanta
Que tengas una feliz semana
Abrazo
Y a mí me encanta que hayas disfrutado de mis latidos, amigo Victor, mil gracias por estar aquí, por leerme y por latir fuerte hasta quedarte sin aliento.
EliminarQue tengas un feliz fin de semana.
Un abrazo.
Aunque me gustan esos versos iniciales parecía que ibas por otro camino, pero desembocaste en tu habitual pasión, aquella que tiene fuerza en cada palabra.
ResponderEliminarBesos con dulzura Mi Hada Perlada y dulce semana.
Me gusta ir por otros cauces y así que os sorprendáis sin que podáis llegar a imaginar lo que pueda venir después, pero sea como sea, la fuerza queda impregnada en mis letras porque salen del interior.
EliminarDulces besos perlados, Señor Dulce Caballero y feliz fin de semana.
Me gusta el salir de la calma, a esas locuras, a esas tormentas.
ResponderEliminarUn viento intenso puede representar el deseo.
Inspirados versos. Me gustan las imágenes que elegís.
Besos especiales.
Me encanta salir del cauce tranquilo del río para después que mis letras se desborden entre mareas, mi querido amigo Demiurgo, y es que así es la emoción, desde el estado de calma hasta llegar al viento del tsunami toda una tormenta de emociones.
EliminarMe alegra disfrutes con las imágenes que comparto.
Besos especiales.
Se admira lo que uno nunca podría escribir, lo que atrae y fascina. Se admiran las maneras de sentir que no son las de uno. "Iris del deseo, en esta abandonada apatía, la sustancia más líquida del último suspiro..." El deseo que enalteces, el placer que dominas... ¿Cuál es la causa y cuál el efecto? Alta poesía, María, que turba, incita, por momentos quita el aliento, despabila...
ResponderEliminarTe mando un sincero abrazo amiga!
Me encanta que hayas pronunciado uno de mis versos, amigo Carlos, y que latas y vueles con mis letras apasionadas, y te dejen sin aliento, las que dominan mi cuerpo alterándome los sentidos, y es que cuando los latidos salen del interior en estado puro se desbordan entre intensas sensaciones.
EliminarUn placer tu compañía.
Un abrazo.
Esos ocho primeros versos son un himno al renacer, es como una crisalida que se quita la piel de lo no deseado y florece con esplendor.
ResponderEliminarSiempre mi admiración Maria.
Besos.
Me encantó lo que dijiste de ***himno al renacer*** y es que has hecho todo un poema con tu precioso comentario, amigo Agapxis.
EliminarMil gracias por estar aquí, sabes de mi admiración hacia tus letras.
Muchos besos.
Me parece de lo mejor que has escrito y descrito. Esa calma chicha de muchos días se ilumina, ya sea real o virtualmente, con los colores del deseo, del delirio del placer buscado que nos devuelva a la vida
ResponderEliminarPrecioso, dulce María. Un beso y feliz martes
Las cosas que escribo siempre me salen al momento, depende de mi interior, de las circunstancias, de las musas, que algunas veces nos acompañan y otras veces parece que se van de vacaciones, pero sea como sea, me resulta grato que disfrutéis de mis latidos, mi querida Albada, y si os gusta, pues mucho mejor.
EliminarBesos enormes y feliz noche.
Qué cosas escribes de madrugada. Yo las leo por la mañana y me voy a trabajar. Creo que hoy la ducha tendrá que ser medio fría.
ResponderEliminarBesos.
Es cierto, suelo escribir casi siempre por la noche, y además, bastante tarde, tal vez sea porque todo está en silencio y es más fácil concentrarse, y luego vosotros me léeis para el desayuno de la mañana.
EliminarMuchos besos, Macondo.
Hola Dulce María. Seguramente que tú puedes asaltar todo lo que te propongas porque todo en tí es dulzura.
ResponderEliminarEl placer es uno de los más exquisitos dulces para asaltar.
Bello poema.
Besos, Dulce María.
Mi querida Isa me miras con muy buenos ojos, mil gracias por tus palabras tan dulces, y sí es cierto que el placer es uno los más exquisitos dulces para atracarse a ello.
EliminarUn placer tu siempre compañía, mil gracias por estar.
Besos enormessssss.
Me encanta como personalizas las palabras, la ultima estrofa es un cierre perfecto, para todas las sensaciones descritas. Un abrazo poeta
ResponderEliminarEn la última estrofa está toda la esencia, mi querida Ester.
EliminarMe encantas y me encanta tu compañía.
Un abrazo enorme.
Renacer entre la carne y el alma, pasionales tus versos
ResponderEliminarBesitos grandes
Renaciendo a la vida desde la calma hasta la lujuria.
EliminarMil gracias por tu compañía, Cora.
Besos enormes, preciosa.
"Trenzándote besos con mis labios de fuego"
ResponderEliminarFuego que envuelve en lujuria a mi cuerpo
Y lo renacen sentimientos entre el agua y el hielo,
Convirtiendo la luz en el iris de su anatomía
Para romperse entre los varazo de su cuerpo.
Un beso
Como me gusta que vueles con los versos de mi poesía, y que tu imaginación siga volando lejos, eres un poeta que late y brilla entre emociones y me encanta que vueles en mi rinconcito, amigo mío, gracias por tan bellos versos, que iluminan mi blog, mil gracias por estos regalos.
EliminarFuego que arde
entre los renglones de la poesía,
latiendo entre las llamas,
los versos que derramas,
ecos de tus latidos.
Besos.
"...tus latidos."
Eliminarlos que atrapan las palabras y las hacen rincones sin fondo.
Suaves plegarias donde mi cuerpo reposa y mi alma se solaza,
dejando un rescoldo de ascuas las que, traje de tu castilla y
las mecí entre mis brazos... brazos que miman tus versos...
brazos que sueñan y placen en los campos lleno de pisadas
las que pisaba mi cuerpo, y mi mente reposaba, por la
campiña castellana entre cepas repletas de tu savia.
Un beso
Antonio
EliminarMi querido amigo, aquí otro comentario que he podido rescatar, creo que ya están todos, pero seguiré revisando algunas entradas más para ver si ya están todos, así como los de los demás amigos que quedaron también en spam.
Gracias siempre por tu compañía, la que me acuna y me da tanta luz.
Latidos que se trenzan,
brazos que se enlazan,
palabras que se acunan,
emociones que se laten.
Besos.
Como ha ido cogiendo intensidad hasta ese último suspiro. Perfecto.
ResponderEliminarMuchos besos :D
Es cierto, al final he terminado de manera intensa, fui retomando fuerzas.
EliminarUn placer tu compañía, mi querida Margarita.
Muchos besos, preciosa.
...y habitó entre nosotros la perfecta forma de citar el deseo y la pasión. Como acostumbras.
ResponderEliminarBesos.
La mejor forma de moldear el deseo y la pasión, desde el interior, amigo Juan L.
EliminarMuchos besos.
Muito sensual!! Amei
ResponderEliminarBeijo e um excelente dia
Muchas gracias, preciosa, por tu compañía.
EliminarBesos enormes y feliz tarde, Cidália.
Un abrazo y feliz semana.
ResponderEliminarGracias, otro abrazo también para ti y feliz semana, Rafael.
EliminarPalabras liquidas.
ResponderEliminarBesos.
Wuuuauu eso sí que me encantó dijiste ***Palabras líquidas*** wuauu.
EliminarBesos, amigo Alfred.
es genial esa sensación de renacer con fuerza después de un período de debilidad. has escrito un bello poema en el que abundan los gerundios (galopando, cincelando, hidratando, rompiendo...). en cuanto al último verso, los líquidos tienen la propiedad de adaptarse a la forma de su recipiente. dos cuerpos unidos, también se adaptan uno a la forma del otro.
ResponderEliminarbesos, maría!!
Desde la calma y la apatía o dejadez hasta retomar energías para terminar con fuerza, así va este poema, desde un estado a otro, y en el que como bien dices, amigo Chema, abundan los gerundios, para terminar desecha entre líquidos derramada, y es que somos almas y cuerpos, pero también agua.
EliminarBesos.
Ese último suspira ha cerrado el poema magistralmente.
ResponderEliminarUn placer renacer al leer este poema.
Feliz tarde María.
Ungran abrazo.
Renaciendo para terminar en un suspiro, el más grande.
EliminarUn placer tu compañía, mi querida Carmen.
Un abrazo enorme y feliz tarde.
Las tormentas que nos tienes acostumbrados son las más bellas , son esas de fuego de pasión y el anhelo de lo prohibido ..dejas en cada reglón tanto de ti María que haces que cuando leamos te veamos al lado declamando ese poema que leemos con tanto entusiasmo.
ResponderEliminarFeliz Martes mi bella y pasional María ...muakissssssssss y un fuetre abrazo muaaaa.
Así son mis tormentas, o mejor dicho, mis tsunamis, mi querida Campirela, intensas, apasionadas, envueltas en el fuego, también entre mareas, cuando los latidos son intensos, todo se hace clamor y vida desde la energía.
EliminarTe deseo una muy feliz tarde.
Un abrazo enorme y besos a montones.
Hola Maria.. La verdad me he leído el poema dos veces, lenta y suavemente, me parece magistral, sobre todo la primera mitad, lo digo en serio sin ironías, esta bordado inspiradisimo.. Es un poema envuelto entre sedas que descubre la vida..
ResponderEliminarUn abrazo..
Cada poema es diferente, porque así son las emociones, dependiendo del momento, y en éste, se evidencian dos estados, uno suave, como tú dices, con calma, y el otro lleno de energía, y me alegra que hayas disfrutado de él, amigo llorenc, un placer para mí.
EliminarUn abrazo.
Yo sí que me he deshecho al leer el último párrafo *___*
ResponderEliminarUna maravilla, como siempre.
¡Un besazo, preciosa!
Los últimos versos son así, más apasionados, hasta llegar al final, donde se hace agua.
EliminarUn placer tu compañía, mi querida Dafne.
Un besazo muy grande.
Eso sí que es un renacer fuerte y con ganas.
ResponderEliminarMaravilloso leer este poema con tanta garra.
Besotes.
Renaciendo desde la calma hasta derramar poesía.
EliminarMuchas gracias por tus palabras, Buscando.
Besazos, preciosa.
Buenas tardes, María:
ResponderEliminarY renaces en nuestros pensamientos y sensaciones al leerte, impetuosa y loca, pero ante todo libre.
Un abrazo, María.
Libre como el viento, volando entre el aire hasta tocar el cielo divino.
EliminarQue tengas una muy feliz tarde, amigo Nino.
Un abrazo.
Renaces con ese ultimo suspiro. Es un poema que va creciendo cada vezque avanza. Es iincreible como tu, amiga. Besos mil preciosa
ResponderEliminarAsí como bien dices, mi preciosa Alicia, un poema que va creciendo en emociones y latidos.
EliminarBesos enormes.
Realmente, María: ¡qué envidiable no parar!
ResponderEliminarUn beso.
Que no pare el latido... ¡ni tampoco la poesía!
EliminarUn beso, Pitt.
E'la passione a trasmettere un affascinante e vero scopo alla vita, colmandola di intense vibrazioni d'amore
ResponderEliminarSempre bello leggerti, Maria, buona serata,silvia
La pasión es la locura de la vida más allá de las palabras, desde el fondo del corazón vibrando en emoción.
EliminarMuchos besos, mi querida Silvia.
Muy bonito, con una fuerza tremenda en tus letras. Un renacer a la vida, al amor, al deseo...
ResponderEliminarUn beso enorme.
Renaciendo del letargo, de la calma, para ser tormenta licuada.
EliminarUn beso enorme, mi preciosa Carmen.
Un poema precioso y lleno de una fuerza que envuelve.Besicos
ResponderEliminarLa fuerza que envuelve la vida ese estado de pasión alborotado.
EliminarBesos enormes, mi querida CHARO.
Renacer desde esa pasión y lujuria que supuran siempre tus versos… Esos, cincelados con tu pluma incandescente… Hoy, con brío; fuerza, intensidad…
ResponderEliminarCojo aire y suspiro… Un placer sentir tus fervientes latidos, mi preciosa María.
Bsoss y cariños enormes, y muy feliz tarde 😘
Desde la calma hasta la tormenta, desde la muerte hasta la vida para volver a morir, un renacer constante, así es la vida de las emociones, las que nos envuelven en vibraciones.
EliminarSuspiremos y sintamos, mi querida Ginebra, gracias por volar conmigo.
Besos enormes con cariño y feliz tarde.
Es verdad que los primeros versos tienen un desgarro que pareciera conducirnos (como dice Dulce) por otros caminos,pero,de pronto,el giro sensual nos envuelve y devuelve a los apasionados versos que destilan sensualidad!
ResponderEliminarUn besazo!
Como un dueto de emociones, distintas en un mismo poema, latidos que van creciendo en pasión, mi querida lunaroja.
EliminarUn placer leerte, preciosa.
Un besazo enorme.
Amei esto poema,moito lindo Maria
ResponderEliminarbeson meus
Morris
Muchas gracias por tu compañía, Morris.
EliminarBesos.
Guauuuu pura pasión en tus letras. Precioso!!
ResponderEliminarUn besazo.
Emociones que nos desgobiernan, mi querida Carmela.
EliminarUn besazo enorme.
Me encanta este renacer tan fogoso con el nuevo año María Isabel.
ResponderEliminar¡Besos ardientes!
Vamos despertando para ir renaciendo en emociones y latidos.
EliminarBesos de fuego de María Perlada.
Muy hermoso el poema, en cuanto a la de la foto, con esa postura, corre el riesgo de que se le descoyunte una teta.
ResponderEliminarBesos.
Jjajajaja me sacaste sonrisas, Rafa, eres tremendo.
EliminarUn placer leerte.
Besos, simpático.
María,sea erótica o no,la poesía la dominas como nada!!Pones el verso adecuado en la estrofa adecuada;pones la palabra adecuada,en el verso adecuado y si no fuera adecuado,también valdría un millón.
ResponderEliminarEres muy buena y dominas la poesía como nadie!!
Besucos mujer!
Gó
Muchas gracias por tus cariñosas palabras, mi querida Gó, lo importante es transmitir lo que una siente, esté bien o mal es lo de menos, pero si os gusta, entonces ese es mi premio.
EliminarMil gracias por tu hermosa compañía.
Besazos, preciosa.
Me sacaste un gran suspiro querida.
ResponderEliminarUn abrazo
Qué bueno poder sacarte un gran suspiro, un placer, mi querida Eugenia.
EliminarUn abrazo.
preciosas letras con mucha fuerza que incita a uno a poner a gozar.
ResponderEliminarbesos.
Es la fuerza que transmite el corazón, amigo DRACO.
EliminarMuchos besos.
Un renacimiento al más sentirse viva, al más puro fuego... Ojalá siempre fuéramos capaces de dejar atrás la triste apatía. Hermosos y apasionados tus versos, María. ¡Buena manera de empezar mi día! Graciasssss.
ResponderEliminarUn beso grande de miércoles.
Es verdad, ójala dejáramos de lado la nostalgía y tristeza que a veces se apodera de las almas, y en su lugar, arrancáramos latidos de pasión, es lo mejor, pero tiene que haber en cada momento un poco de todo.
EliminarUn placer tu compañía, mi querida Julia.
Un beso enorme de Domingo.
Sempre imagens e poesia de uma sedução ímpar
ResponderEliminar.
Nota: Temos uma brincadeira no Delírios. Quer participar?
Me alegra que disfrutes de mis entradas, Lenita.
EliminarGracias por tu invitación.
Muchos besos.
Bello este renacer tuyo. Hasta donde tus metas, querida María? Que creativa!
ResponderEliminar... ese suspiro y el éxtasis. Maravilloso!
Abrazos de vida
Un renacer que va creciendo en el trazado de las emociones y versos, amigo Duarte.
EliminarMe alegra verte por mi rinconcito, un placer tu compañía.
Abrazos enormes.
uufffff es a fuerza que deja huellas llenas de placer por renacerá siempre precioso versos la foto espectacular, un beso mi niña
ResponderEliminarRenacer desde la emoción hasta el corazón.
EliminarMil gracias por tu compañía, mi preciosa amiga.
Besos enormes, Beatriz.
"En la sustancia más líquida del último suspiro", cómo te exornas en las sutil de las metáforas para desvelar el camino del orgasmo. Un abrazo. carlos
ResponderEliminarMe encanta dar al orgasmo diferentes sonetos de voz entre metáforas distintas, amigo Carlos, un placer que hayas pronunciado mi frase.
EliminarUn abrazo.