martes, 11 de noviembre de 2025

"El lapicero mágico"

 



Olga, una niña de once años, había acudido a la papelería cercana a su casa, porque necesitaba comprar material para el colegio. Y en la tienda de Ambrosio, dueño del establecimiento, se liquidaban todos los articulos a mitad de precio, porque dentro de unos meses iba a cerrar el negocio por jubilación y necesitaba agotar las existencias.

- ¡Hola! Dijo Olga. Quiero un lapicero, concretamente, el que está en aquella estantería, y también quiero un blog de dibujo.

Ambrosio envolvió el material y después de coger los euros, se lo entregó a la niña.

¡Qué contento estoy! por fin puedo salir de este lugar tan mugriento y oscuro, con olor a moho, casi las goteras me enferman de la humedad. Cuarenta años aquí encerrado, y nadie me había comprado. Reconozco que soy un poco feo, pero por fin alguien me ha visto con buenos ojos. Hoy comienzo a tener autonomía personal. Desde ahora mi vida se llena de luz. Dijo el lapicero rebosando felicidad.

La niña se fué tan contenta al colegio. Hoy tenía examen de dibujo, y estrenaría su lapicero.

Ya en clase la profesora les dijo que comenzaran a dibujar. La niña no se lo podía creer. El lapicero parecía automatico. Nada más cogerlo de la mano empezó a dibujar un paisaje. Creando imágenes dinámicas con sonidos. El paisaje cobró vida. 

La profesora recogió los dibujos y empezó a corregirlos. Al ver el de Olga se quedó alucinada felicitándola por ello, siendo la alumna que mejor nota obtuvo de la clase: un sobresaliente. 

Y es que el lapicero llevaba tantos años sin hacer nada, encerrado en el establecimiento de Ambrosio, que tenía muchas ganas de trabajar. Y como agradecimiento se esforzó todo lo que pudo para hacer a la niña tan feliz como lo estaba siendo él, ya que, gracias a ella, vio la luz.



Otras aportaciones que dan vida a objetos inanimados

en el blog de Rebeca con su reto "Fuego en las palabras"



María


martes, 4 de noviembre de 2025

"Un cambio radical"




Jorge y Ana se habían casado hace tres años. Los jóvenes estaban muy enamorados, y su proyecto de vida a corto plazo era tener hijos. No los habían tenido antes por su inestabilidad laboral que no les permitía pagar la hipoteca ni tener horario conciliador para poder formar una familia. Y ahora que, por fin, tenían contratos indefinidos en sus respectivos trabajos, era el momento ideal.

Pero la vida se puso en contra de ellos. Ana llevaba una temporada que no se encontraba nada bien, y había acudido a varios especialistas de la sanidad pública, sin que le encontraran nada anormal. Por lo que, Jorge, decidió llevarla a una clínica privada. Fue cuando en una de las pruebas específicas encontraron lo que tenía: un tumor agresivo en el páncreas con metástasis.

En aquellos momentos no podían dar crédito a las palabras de los Doctores cuando les dijeron que le daban un pronóstico de vida de dos meses. 

Después de varias semanas de sufrimiento y agonía, falleció Ana. Jorge sumido en el pozo del abismo, no pudo superar la muerte de su amada, para él la vida ya no tenía sentido. Todo le recordaba a Ana, con cada paso que daba, y todos sus proyectos estaban relacionados con ella.

Por lo que, nublado en la tristeza, decidió acabar con su existencia en la misma habitación en la que ambos tanto se habían amado. 

Ató su cuello con una soga que colgaba de la lámpara, retiró la silla, y allí acabó ahorcado en la habitación del amor. Su alma se reencontraría con ella. Tal vez, ambos por fin, podrían formar la familia que tanto habían deseado al otro lado de la vida.



Más relatos jueveros en el blog de Marcos


María


sábado, 1 de noviembre de 2025

"Tertulia del amor"

 



Naturaleza desnuda.


El mar,

la lluvia,

la brisa,

tú y yo.


Danzan las olas,

ondas de emociones,

suspiros salados,

viento desordenado,

soplo de arena.


Líquida luz,

duna húmeda,

espectáculo acuoso.


Naturaleza encendida.




Mi aportación en el blog de Roselia



María