renace el otoño,
nacen las nostalgias,
cae la luz en los días,
se desploman las hojas.
Los silencios se perpetúan,
se mitiga el brillo en las pupilas,
se quiebran las tardes,
se resienten las sonrisas,
las llamas se apagan.
Se agrietan los versos,
se ahogan los suspiros,
vagabundean los pensamientos,
los bosques se cubren de niebla
las calles se abrigan de soledades.
Se resecan los besos,
se oscurecen las horas,
se estremece la vida,
se escarcha el presente,
se congela el futuro.
Hermoso Maria. Las imágenes creadas son fantásticas.
ResponderEliminarBeso
Me alegra te gusten las imágenes, Unknown, y gracias por tu visita. He intentado ir a tu blog pero no he podido.
EliminarBeso.
Hola María.. Aveces me sorprende, aunque no se de que, porque demostrado esta la preciosidad de tus poemas, pero admiro esa pasión que pones en ocasiones, como admiro esa melancólica sutileza que hay en poemas como este.. El silencio se perpetua, sintiendo el susurrar de fondo, mientras leo y releo como relamiendo la dulzor de las palabras..
ResponderEliminarUn abrazo..
Aunque ya hayas volado lejos, aquí te sigo sintiendo, amigo llorenc, ya sabes que te puedes ir las veces que quieras, que como si estuviera ahora charlando contigo, y siempre es un placer, y más cuando me haces la "pelota" diciendo que admiras esa pasión que pongo en ocasiones jajajaaj pero que te lo digo en bromasssss, si es que contigo se puede charlar tanto en bromas como en serio, me da gusto tu compañía, de verdad, así que no tardes en volver de vacaciones, que ya te estoy echando de menos, aunque me llames egoista jajaja.
EliminarMe encanta que me leas, y me releas con tanto dulzor de palabras jajaja, eres tremennndoooo jajajaaj.
Un besazo, guapísimo.
Y se acerca el invierno, se alargan las noches y la nostalgia insistente, reclama aquellos maravillosos días de luz y de sueños.
ResponderEliminarOtra de tus facetas en un precioso poema.
Cariños.
kasioles
Ainsss no me los recuerdes, querida Kasioles, aquellas tardes largas de sol y verano, de paseos y horas de tiempo al aire libre, qué me pongo más nostálgica de recordar aquellos días, y ahora que a las seis de la tarde ya es de noche, se me juntan los días con las noches, qué cortos se me hacen los días, y qué poco me dan de sí en el invierno, tanto invernar en casa, tanto recogimiento, porque no hay nadie por hay con el frío que hace y más que hará en los días venideros.
EliminarBesos cariñosos.
Se congela el vaho
ResponderEliminaren las albas frías,
se humedecen las plazas
en las madrugadas solitarias.
los cortos días
las largas noches
las lunas sin cohetes
el sol ha escondidas.
Qué bonitos tus versos, Lluis, me encanta leer tus poesías, y volar entre ellas. Mil gracias. Besos.
EliminarSe me congelan los suspiros
en las noches de invierno,
se me estremece la vida
en los días de otoño,
se evapora la luna
entre mis pupilas.
A mí me provoca nostalgia la primavera, más que el otoño, pero sea cual sea la estación el futuro no debe congelarse, hay que seguir siempre adelante.
ResponderEliminarBesos con dulzura Mi Hada Perlada y dulce semana.
Entonces somos totalmente opuestos, a ti te produce nostalgia la primavera, y a mí el otoño y más al invierno que solo de pensar que en nada llegará, se me congela, no solo el futuro, sino las ideas.
EliminarDulces besos.
Nostalgias
ResponderEliminarde escuchar su risa loca
y sentir junto a mi boca
como un fuego su respiración.
Angustia
de sentirme abandonado
y pensar que otro a su lado
pronto... pronto le hablará de amor...
(Enrique Cadicamo)
Son preciosos tus versos que compartes de Enrique C, muchas gracias, javier miro, por el detalle que has tenido de regalármelos, miraré a ver por internet quién es ese poeta, que no lo conozco. Besos.
EliminarNostalgias que abrazan,
que se sienten
abandonándose
desde el presente
hasta el tiempo pasado.
una época de reflexión, de mirar un poco el pasado y sacar valiosas reflexiones para el futuro.
ResponderEliminarun beso.
Es una época que nos invita a reflexionar sobre lo que se ha ido y lo que puede llegar, pero más para sentir la calma del presente de cada día, así es el otoño e invierno, amigo DRACO, como tú muy bien lo has expresado.
EliminarUn beso.
Esa imagen me gusta mucho, me transmite tranquilidad.
ResponderEliminarMucha melancolía en el poema de hoy, quizá como la propia estación que lo ha inspirado. A mi me gusta el otoño, tiene como las personas, una mezcla de días buenos y no tan buenos.
Y aunque el invierno se acerca, hay que seguir avanzando para no quedarnos congelados.
Un besazo, preciosa.
Y muy buen martes.
Me alegra te guste la imagen, Prozac, a mí también me gusta, pero no me transmite tranquilidad como a ti, sino más bien la definición de lo que para mí es el otoño, es esa soledad que se siente en las calles, hasta el banco está vacío acompañado por las hojas secas caídas de los árboles, se nota nostalgia en esa imagen, por lo menos, así lo siente mi mirada, que no quiere decir que sea la misma mirada para los demás, ya sabes que cada uno interpretamos las cosas a nuestra manera.
EliminarAsí siento el otoño, así siento el invierno, desde la descripción de mis palabras, ese frío que llega hasta el alma, ese frío de soledad, de invernar, de refugiarse... pero como tú dices... hay que seguir avanzando, por supuesto, eso siempre.
Muy feliz noche, preciosa.
Un besazo.
Un poema gráfico, nos dejas visualizar los sentimientos, sentir el otoño y ese poso melancólico, es un lujo poder leerte. Abrazucos
ResponderEliminarEs así siempre, Ester, no sólo en este poema, sino en cada uno de los que publico llevan mucho de mí, aunque algunos pareciera que no llevan nada, todos expresan algo de mi interior, de mis alegrías, de mis tristezas, de mis preocupaciones, de mis emociones, de mi felicidad, en cada uno están visualizados mis sentimientos, y yo los comparto con todo el placer, bien sean nostálgicos como desbordantes.
EliminarUn beso grande.
Unas nostalgias que vuelven a nosotros siempre.
ResponderEliminarBesos preciosa y feliz día!!
La nostalgia también forma parte del ser humano, es imposible no sentirla alguna vez.
EliminarUn beso enorme, preciosa Rosana.
Pero no hay que preocuparse en exceso... pronto vuelve el clima cálido, el que vuelve a poner jugosas las bocas. No hay que perder la cabeza por una mala racha: siempre pasan ^^
ResponderEliminarMe encanta tu manera de ver las cosas con tanto positivismo, Holden, un placer leerte, como estar con gente positiva como tú, y claro que así debe ser, pero también es bueno describir esas sensaciones que una llega a sentir para liberarse de ellas, es que para mí es un placer desahogarme, o bien de manera nostálgica como de manera apasionada, y por eso con gusto comparto mis emociones.
EliminarUn besazo.
Buen poema, y otoño lluvioso. Aquí en un día ha llovido más que en todo el año.
ResponderEliminarBesos María.
Es lo que suele pasar, que lo que no llueve en un año, luego llueve en un día todo, ya ves que mundo más desequilibrado, que hasta el tiempo lo está jajaja.
EliminarBesos, simpático Rafa.
Mais um precioso poema. Lindo demais...Amei
ResponderEliminarBeijo
http://coisasdeumavida172.blogspot.pt/
Muchas gracias, Cidalia, un gusto para mí tu visita.
EliminarBesos.
Las ganas que tengo de que pase...
ResponderEliminar; )
Vamos,que ya queda menos!
Besazooooo
Jjajaja lo mismo que yo, Carmen, ainsss las ganas de que pase, pero bueno, ya de aquí a unos meses, no falta "ná de ná" jajaja.
EliminarBesazoooooooooooooo.
Son tus palabras el conjunto de este día... Y me meceré en ellas y en este café que sostengo porque... Pese al mensaje, abrigan en su desnudez. La nostalgia junto con el otoño desnuda el alma, será por los nuevos aires,será por ese cambio que todos vivimos.
ResponderEliminarHa sido un placer tu compañía, mi bella alma gemela.
Mil besitos preciosa.
Todo tu poema merece mi admiración y sin embargo rescato este verso...
"Se agrietan los versos,
se ahogan los suspiros,
vagabundean los pensamientos,
los bosques se cubren de niebla
las calles se abrigan de soledades".
El placer es para mí tu compañía, mi bella alma gemela, tú sí que mereces mi admiración, no solo por el arte que fluye de ti tus sensuales letras, sino por ser como eres, un solecito lleno de cariño, ternura y generosidad para todos, mil gracias.
EliminarParece tomas muchos cafés ten cuidado que te pondrás de los nervios, yo suelo tomar descafeinado sino me pongo como una moto jajaja, pero también me encanta tomar té.
Un placer te hayan gustado esos versos que destacas, preciosa mía.
Besitos enormes.
Siempre la belleza acuna tus poemas, como sintiendo nostalgia de nanas guardianas de sueños que quedaron en el olvido.
ResponderEliminarNostalgia de esos brazos protectores cual escudo guarda del filo de las espadas.
Eres mi bella Maria,
Te dejo un sentido besito guapa.
Mil gracias, mi querida amiga Gloria, tus palabras me acarician, y siempre es un placer leerte, me ha encantado cómo has definido mis poemas, sobre las nanas guardianes de sueños que quedaron en el olvido.
EliminarYo te mando un abrazo inmenso con cariño, y gracias de nuevo por sentir de esa manera mis letras.
Me encanta el otoño, María. Sus colores, su sol bajo, su tibieza...
ResponderEliminarEl petricor me trae recuerdos.
Qué bonito poema. Da gusto venir a leerte.
Un beso
Lo que pasa que mi poema no es muy positivo, pero me encanta te haya gustado, a pesar de sentir así el otoño, tan frío, en cambio, tu mirada hacia el otoño es positiva, me alegra me lo hagas llegar así, amigo Gumer.
EliminarUn placer leerte, así como contemplar las imágenes que compartes en tu blog.
Un beso.
Me gustó tu poema. Pero habrá que saberle encontrar al otoño su belleza...que la tiene.
ResponderEliminarUn beso.
Claro que tiene su belleza el otoño para aquellas miradas que les encanta esa estación, pero mis ojos encuentran más cosas negativas que positivas, amigo Juan L. y es porque no me gusta esta estación, para gustos se hicieron tantos colores :-).
EliminarUn beso.
El otoño... el invierno son caricias para mi alma...
ResponderEliminarMi nostalgia es que solo pueda vivirlas una vez al año... y deba esperar...
Bello tu poema, Marieta.
Un beso.
Tú eres de otoño y de invierno ¿tendrá algo que ver el que cada uno nazca en una estación u otra? tú naciste en otoño, y yo de verano, no lo se sin influirá o no, pero sea cual sea, me alegra que encuentres esas caricias en estas estaciones, a mí se me congelan hasta las ideas.
EliminarUn placer tu compañía, Mag.
Un besazo.
Muy precioso, y muy de acuerdo. La nostalgia otoñal es como el resfriado, no te lo quitas hasta que entra la primavera. Se caen las hojas, ¿se caen los sentimientos?
ResponderEliminarBesazos.
Fijate que el otoño lo comparo con la muerte, se marchitan las hojas, y parece es época donde hay más fallecimientos, por el cambio de estación, como si se apagaran las vidas, ¡qué cosas!
EliminarMe gustó el ejemplo que pusiste sobre la nostalgia otoño que es como el resfriado, que aunque yo no soy de resfriados, pero hay gente que uno tras de otro y hasta el verano no están bien.
Besazos, Buscando.
BELLO!!!
ResponderEliminarHas dibujado hermosamente usando versos, esta estación que recubre de nostalgias sus días...
Me encantó tu poema, María. Muy identificada en ese sentimiento que describes
Besotessssssssssss
Cómo me gusta verte aparecer, mi querida Gizela, un placer tenerte aquí tantos años ya desde nuestros comienzos y aquí seguimos cerca las dos, gracias, preciosa.
EliminarY me alegra te hayas sentido identificada con mi poema, y que coincidas conmigo sobre esta estación tan distinta a la del verano.
Besazossss enormes.
Mmmmm, so nice.
ResponderEliminarYou capture the season, the feeling.
Kisses.
xxx
Seguro que tú has hecho unas fotos sobre el otoño de lo mejorcitas, amigo Rick, si es que eres un estupendo fotógrafo, que cuando voy a tu blog y las veo me encantan, además, siempre tan variadas.
EliminarBesos.
Y el corazón se encoge, y se refugia en los pliegues de tú piel.
ResponderEliminarBuscando cobijo y amparo, a la espera de una incierta primavera,
con la fé puesta en el triunfo de la luz y del amor,
ansiando volver a respirar la fragancia del azahar en el anochecer.
Mira que eres un estupendo poeta, aunque no lo quieras reconocer, me dejas sin saber qué decir cuando te leo, es maravilloso lo que escribiste en prosa, amigo Rodericus, está para enmarcar, gracias de corazón. Y recibo un regalo en prosa, tú también tienes mi regalo, aunque no sea tan brillante como el tuyo, sale de mi corazón. Un besazo.
EliminarY mi alma tiembla
y se refugia en otra alma,
para encontrar el calor
y la luz de otra estación.
Al menos con las estaciones lo que fue, vuelve.
ResponderEliminarUn beso,
Noa
Qué positiva eres, Noa, cómo me gusta lo que has dicho, y así es, realmente.
EliminarUn beso grande, preciosa.
Bellos versos aun sumidos en nostalgia… A veces languidece la luz… Se deshoja el alma, y todo llueve… Pero siempre hay una grieta, por pequeña o débil que sea, por donde se filtre esa luz, viva y poderosa, que haga florecer de nuevo el alma y la piel…
ResponderEliminarSiempre un placer leerte, y sentir(te), mi preciosa María…
Bsoss y cariños gigantes!! ♥♥♥
El alma se congela y hasta las pupilas se desbordan de contemplar el frío otoñal que se nos va para recibir al invierno entre sombras.
EliminarMe encantó lo que dijiste, Ginebra, de que la luz se filtra poderosa por entre la grieta que haga florecer de nuevo el alma, siempre hay que ver el lado positivo de las cosas.
Besos cariñosos, guapísima.
Buenos días, María:
ResponderEliminarEs llamativo el que sintamos más nostalgia por lo que muere que esperanza ante lo que renace. En muchos casos nuestro estado de ánimo es tan estacional como el paso del tiempo meteorológico, y confiamos en que renacerán, llegarán o brotarán tiempos mejores.
Quizá la nostalgia sea un periodo de lucidez en el que abandonamos el autoengaño del renacer: la muerte es muerte, nada vuelve a ser lo mismo.
Un abrazo, María.
Hola, Nino, buenas tardes. Qué bueno está tu comentario, y además, estoy de acuerdo contigo, al comparar nuestro estado de ánimo como las estaciones, sí que es cierto eso, así que si ayer tuvimos otoño hoy renacerá el sol o viceversa, porque todo puede aparecer en nuestros días, ¿imaginas que siempre fuera otoño? ya vendrá el bien tiempo, y con él, renacerá nuestra mirada, o tal vez, al contrario, que aunque no llegue el otoño, nuestro estado de ánimo florecerá.
EliminarY en cuanto a lo que dices de la muerte, muy de acuerdo contigo, oye mira que son reflexivos e interesantes tus comentarios ¿eh? mil gracias, amigo.
Un abrazo.
Por acá, se acerca el verano.
ResponderEliminarMe parece que es la primera vez que no me adhiero tanto a lo que dicen tus versos. Tal vez surja la nostalgia con el otoño, tal vez se oscurecen las horas. Pero no creo que el otoño haga que se resequen los versos, sino que surjan con más fuerza. Como estos versos que nos regalas. Ni que se resequen los versos. Siendo que la vida se estremece.
Besos especiales.
Qué bueno que por allá se acerque mi estación favorita, la del verano, ¿sabes que no me imagino unas navidades en verano? imagino que a ti también te pasará lo mismo, no las relacionas con mi invierno de acá.
EliminarParece que esta vez no estás de acuerdo en algo de lo que he versado, pues a mí me encanta que me lo hagas saber siempre, estés o no estés de acuerdo, porque me encanta conocer tu opinión, mi querido amigo Demiurgo, y aunque se oscurezcan las horas tú piensas que mis versos no se reseca, sino que relucirán mucho más, al sentir la vida que se estremece, y es que se puede estremecer de tantas emociones distintas.
Gracias siempre por tu compañía, en verdad, lo aprecio de corazón.
Besos enormes y especiales.
Bonito poema, María. La tristeza con nosotros viaja... aunque no queramos ir con ella. Es un estado del alma como el que te quiere sin que lo sepas.
ResponderEliminar-
Estoy en Benidorm. Triste día lluvioso que el leerte alegra.
Besos.
Qué suerte tienes de estar en Benidorm con lo que a mí me gusta, y raro es que haga malo por allí, pero mira, también llueve, no hay excepciones.
EliminarClaro que la tristeza es viajera aunque no nos demos cuenta que nos acompaña, y aparezcar por cualquier motivo, sorprediéndonos.
Un placer es para mí tu compañía, amigo Eloy, mil gracias por estar.
Besos.
Me encanta María.
ResponderEliminarY a mí más tenerte aquí, Xad.
EliminarUn besazo.
El Otoño que también se siente en el alma.
ResponderEliminarLa belleza en tus letras, María.
Besos grandes.
Puede hacer un espléndido y soleado día y encontrar el otoño en tu mirada del alma, así es, mi querida C.Lucía.
EliminarBesos enormes.
Precioso verso. Buenas tardes, Maria un abrazo.
ResponderEliminarMuy buenas tardes, Manuel, gracias por estar, espero que disfrutes de tu fin de semana de lo mejor.
EliminarUn abrazo.
Bellos y tristes versos con los que describes al otoño......el otoño también es color.Besicos
ResponderEliminarYa veo que para ti el otoño es color, aunque de mis palabras salgan notas negras y tristes, CHARO.
EliminarBesazos.
Muito bonito. Parabéns
ResponderEliminarhttp://prazeresecarinhossexuais.blogspot.pt/
Bjocas :)
Muchas gracias Filipa.
EliminarBesos.
yo echo de menos y tengo buenos recuerdos del principio del verano, en junio. final de curso, ropa fresquita, quedadas con amigos, feria del libro... luego ya se convierte en una época un poco desértica en cuanto a vivencias interesantes, y al final acabo deseando que llegue septiembre y comience de nuevo la rutina.
ResponderEliminarpronto comienza diciembre, el último mes del año...
besos, maría!!
En realidad, yo creo que nos cansamos un poco de todo, nos gusta que llegue el verano para salir, para disfrutar de la naturaleza, para ir vestidos con prendas sueltas, para ir a la playa o piscina, a las terrazas, etc, pero después, también se añora esa rutina de la vuelta a empezar en septiembre, con el comienzo del curso, y todos esos preparativos, y es que, los cambios, siempre vienen bien, y ahora empezaremos con las navidades, así es la vida, despedidas y de un volver a comenzar.
EliminarBesos, chema.
Los árboles se deshojan, los días se acortan, nuestros poemas entristecen, el recogimiento y el fuego nos mantienen.
ResponderEliminarUn beso.
¿Sabes que hiciste un verso muy lindo, Alfred? tú también tienes mucho de poeta, amigo mío, y de lo que has dicho, hay una gran verdad.
EliminarUn beso.
Uims mi querida María, cuánto tiempo sin asomarme a tu ventanita, bueno...a la tuya, a la mía y a la de todos...ando a carrera limpia y ahora que me he visto más relajada y con tiempo para disfrutar aquí me vengo y me encuentro con esta preciosura sobre el otoño...las calles se abrigan de soledades, se estremece la vida,
ResponderEliminarse escarcha el presente...impresionante!me ha encantado detenerme aquí e impregnarme de tu otoño.
Abrazotedecisivo preciosa María.
se congela el futuro.
¡Qué bueno tenerte aquí! me alegra te hayas acercado, mi preciosa Sara, siempre agradecida de tus visitas, a veces no se puede estar por aquí tanto como se desearía, así que te lo agradezco, el que hayas venido a visitarme un ratito, y que hayas disfrutado de esta entrada tan otoñal, y un placer también tenerte por facebook.
EliminarBesos enormes.
Me han encantado esas nostalgias tuyas que tanto implican.
ResponderEliminarBesos
Muchas gracias, mi querida Ilesin.
EliminarBesazos.
Y queda la nostalgia de lo vivido y lo soñado...
ResponderEliminarUn abrazo.
La nostalgia muchas veces se recuerda sobre las cosas que se recuerdan vividas desde la felicidad.
EliminarUn abrazo en la tarde, Rafael.
Puede que sí, el otoño se lleva muy bien con la nostalgia, aunque la caprichosa a veces desconoce de ambientes y estaciones y arriba cuando menos la esperamos. Precioso poema, bellamente ilustrado. Un fuerte abrazo!
ResponderEliminarQué bueno leerte, Neo, creo tenías problemas en tu blog sobre los comentarios, algo leí desde mi Reader, pero al ir a tu blog no vi ese comunicado, lo mismo ya lo solucionaste.
EliminarLas emociones tal vez no conozcan de estaciones porque puede ser verano y sentir el invierno en el interior.
Un placer te haya gustado mi poema.
Un abrazo inmenso.
Y es que consigues hacerlo tan bonito, mojas la melancolía en un vaso lleno de versos de otoño donde el café de los sentimientos humea esparcido entre nostálgicos pensamientos ensimismados a la espera de su tiempo.
ResponderEliminarUn poema precioso. ( de los que a mi me gustan)
beso.
Y qué bonito es tu comentario, mi querido amigo Agapxis, hiciste todo un poema para enmarcar, me ha encantado, y es que siempre es un lujo leerte, y de ti aprendo cada día, porque eres Mi Maestro de las Letras.
EliminarGracias enormes por siempre estar, y por hacerme volar entre letras tantas veces y un honor que te haya gustado este poema.
Un beso inmenso.
Cuánto frio... pareciera que nos envuelve una bruma que no nos deja ver,que el frío también invita al abrigo,a dejarnos acariciar por unas manos calientes.. Precioso.
ResponderEliminarQué gran verdad lo que dices mi querida lunaroja, de que el frío invita a dejarnos abrigar y acariciar por unas manos calientes, y también por unas palabras que llegan y abrazan.
EliminarMil gracias por tu presencia, es un honor para mí.
Muchos besos, preciosa mía.
Precisos versos los que hoy nos dejas , algo melancólicos pero sin embargo con mucha carga de sentimientos reflejados . Un abrazo y un besote que pases un buen día mua.
ResponderEliminarUnos versos expresados con todo el sentimiento, como siempre escribo, desde lo más profundo, pero en éste caso, desde la nostalgia del otoño, mi querida Campirela.
EliminarEspero estés pasando un feliz domingo, preciosa.
Un besazo enorme.
Los ciclos de las estaciones son también nuestros ciclos internos, el cristal con que miramos todo, como tener un espejo que refleja afuera lo que hay dentro. La magia de una hoja cayendo desde lo alto de un árbol y que se repetirá cada año puede resultar inspiradora para un poema y la luz del sol sobre el agua de un lago hacernos llorar. Lo que vemos nos trae recuerdos, nostalgias de lo irrecuperable.
ResponderEliminarPero uno sigue con las estaciones, caminándolas y tratando de encontrar en cada una lo que necesitamos. Recogemos una charla amena, un café y un libro, una música con amigos. Y, sin más remedio, lloramos todo lo que podemos y nos secamos las lágrimas con el pensamiento de que así como lloramos ahora, también pudimos sonreír.
Besos
Raquel Dono
Qué bueno tenerte aquí, Raquel, de verdad te lo agradezco, gracias por seguir estando, pero debes perdonarme que no te haya respondido el email, en estos días a ver si me pongo a ello porque necesito me digas algo sobre lo que a mí me afecta, pero soy una perezosa para responder emails, tengo ni sé sabe cuántos antes que el tuyo pendientes de responder, soy mal cumplida para esas cosas.
EliminarMe parece precioso lo que has dicho en tu comentario, en cuanto al ejemplo que has puesto sobre el espejo y la magia de una hoja, tus palabras tienen magia, tienen mucha belleza y sentimiento, gracias por el brillo que has dejado en mi blog, preciosa mía.
Besos enormes.
aprecio muchisimo tus poemas. kisses my sweet friend. i love you andy
ResponderEliminarY yo también tus palabras, andy.
EliminarUn beso.
Hola Dulce María. Muy bellos los versos melancólicos otoñales. El otoño también trae cosas ricas como la proximidad para que los cuerpos nos den más calorcito. Hacer el amor entre mantitas o al amor de la lumbre da mucho gusto. Mirar por la ventana y ver la niebla o el agua, nos hace ser más cariñosos.
ResponderEliminarBesosssssssss
Hola, mi preciosa Isa:
EliminarTienes razón en cuanto dices que el otoño trae cosas ricas, también hay que intentar ver el lado positivo de todas las cosas, pero es que es tan poco lo que me gusta el otoño, que no me sale nada bonito, pero gracias por habérmelas hecho ver tú con tus palabras.
Besoooooooooooooosssss.
Hay belleza en la nostalgia, el encanto propio de una estación con identidad propia que si es preciso se desViste de pieles para recomponer su sino.
ResponderEliminarQue si es preciso se viste de ocres para susurrarnos lo que late desde dentro.
Mi abrazo de luz, siempre
Qué bonito tu comentario, mi querida AtHeNeA, tus susurros son lucecitas de brillo para mi mirada nostálgica ante el otoño, pero tienes razón esos ocres son preciosos, aunque me gustan más los colores vivos del verano, pero hay que reconocer que cada estación tiene su propio encanto.
EliminarUn abrazo inmenso a tu Luz.
Nostalgia otoñal que nos persigue.. Como te entiendo, odio el otoño donde todo parece que se muere.
ResponderEliminarUn beso preciosa Maria. Siempre es un placer leerte.
Isa
Entonces igual que yo, por eso me entiendes, mi querida Isa Iss, porque tampoco te gusta el otoño, y así sientes como si todo se muriera.
EliminarUn beso muy grande con cariño, preciosa mía.
Qué belleza, es como un lienzo de otoño... cada verso, una imagen.
ResponderEliminarHermoso querida María.
Besos grandes amiga.
Mi querida Luján, el otro día intenté poner un comentario en tu blog, de este perfil que comentas, y veo que sigue cerrado a los comentarios, tengo que ir al otro de poemas.
EliminarMil gracias por venir acá, tesoro, para dejarme el brillo de tus palabras, mi preciosa amiga.
Muchos besos enormes.
María qué hermoso poema!!! Totalmente distinto a tu estilo, me sorprendiste! Además al leerlo sentí la nostalgia en si misma. Un beso enorme.
ResponderEliminarQué bueno haberte sorprendido, Sindel, me alegra un montón que así haya sido, y que hayas sentido la nostalgia al leerme.
EliminarUn beso grande.
No es tan malo el otoño como lo pintan...
ResponderEliminarNo es que sea malo el otoño, es que cada uno lo pintamos a nuestra manera, según lo sentimos.
EliminarUn beso, Vicente.
La nostalgia es belleza en tus versos, deja un halo de sueños frustrados que no te había leído nunca. Muy inspirados, enmarcados en un otoño íntimo de soledad. Ese futuro que se congela me ha hecho temblar.
ResponderEliminarUn beso bien grande preciosa María, te deseo todo lo mejor😘
Cuánto me alegra volver a leerte, preciosa Chusa, gracias por estas bellas palabras que me regalas, y a veces, ese futuro nos tiembla incluso aunque sea verano.
EliminarYo también te deseo lo mejor.
Un beso enorme y muy feliz semana.
Muy bueno el poema, de verdad otoñal.
ResponderEliminarUn beso, María
Muchas gracias por tus palabras, mi querida Albada.
EliminarUn beso grande.
De la nostalgia me voy escapando poco a poco.
ResponderEliminarPero no tiene mérito, simplemente sucede...
No sé ni si es bueno.
Besos y felicidades por el poema.
Qué suerte que de la nostalgia te vayas escapando, yo creo que cada vez más me adentro en ella, porque a veces, no sabes cómo dar salida a las situaciones y te sientes bloqueado.
EliminarMe alegra te guste mi poema, Xavi.
Besos.
Lindo e sensual. Muito bom
ResponderEliminarBjos
Visite-nos.
Muchas gracias, Larissa.
EliminarBesos.
Un poema de brote nostálgico, de días pasados por el tamiz de la melancolía y del arraigo de un tiempo pasado.
ResponderEliminarBonitas palabras para embolsar un sentimiento de perdida .
Besos María.
Puri
Un poema en el que expresa mucho más que palabras, sentimientos de melancolía, de nostalgia, de tanto y más.
EliminarUn placer tu visita, Puri.
Besos.
No sabes cómo comprendo y comparto tu poesía porque para mí el verano es lo más de lo más.
ResponderEliminarHay otoños que son peores que el invierno, y otras veces, incluso, hasta el mismo verano.
EliminarBesos, Tracy.
Palidece la luz viva
ResponderEliminarDe un verano intenso
Llega el otoño que amansa
Que crea sueños de lo vivido
Grito mi silencio perpetuo
Quiero vivirte intensamente
Sin lágrimas que quemen
No hay olvido en mí
Tú presencia de ayer
Hoy es nostalgia doliente
Aquello que me diste
Besos que permanecen
Grabados en mi otoño
Eres grande mi querida María, sacas de mi lo que una musa debe hacer, creación de la belleza que está dentro de la nostalgia, del amor, del desamor y la desesperación.
Tú eres creación, eres verso, poema y delirio, eres magia mi querida María, no nos dejes huérfanos de tan bellos poemas creados desde la sensibilidad mas exquisita que puede haber.
Un beso enorme
Qué bonitos versos me has regalado, mi querido amigo Adolfo, están para enmarcar, mil gracias por tanta belleza de letras, y para mí es un placer ser para ti tu musa, para sacar de ti lo mejor y escribas así de bonito.
EliminarMe inyectas energía cuando te leo, y cuando me dices que soy creación, verso, poema y delirio y hasta magia ¿se puede decir más? imposible, mi querido amigo, pero sí puedo decirte que tus palabras me abrazan y me acarician, y que es un lujo siempre leerte.
Mil gracias por acompañarme, por ser poesía y latido, y ahora me quedo entre tus versos para volar entre ellos.
Besos enormes.
Soy lágrima viva,
el aliento de la melancolía,
la caricia mustia,
el verbo solitario,
la canción desesperada,
el grito sin voz.
Soy tu otoño florido,
tu silencio marchito,
tu creación impulsiva,
tu musa y latido,
tu lienzo para posar
tus palabras en la piel
de mi nostalgia,
para renacer en tu caricia.
Una belleza de poema, la nostalgia es dura muchas veces.
ResponderEliminarBesos
Sí que es cierto lo que dices, Musa.
EliminarBesos.
"Vagabundean los pensamientos"
ResponderEliminarEn las sombras de su alma,
priorizando los latidos, los de
un corazón que ama y se siente
catapultado entre las olas del alba
cuya sombra se desvanece
encontrando la calor de
tus versos, tu mirada.
Un beso
Muchas gracias, mi querido amigo y poeta, gracias por regalarme tan bellos versos, siempre tan intensos y latidos, siempre iluminan este rincón y mis pupilas.
EliminarUn lujo para mí es contar siempre con tu presencia, que aún en la ausencia sigues estando siempre.
Y ahora mismo vuelo entre tus versos, Poeta de la Magia y Poesía.
Besos.
Versos que laten,
desde el alma
hasta la piel de la prosa,
que renacen cada día,
entre las sombras de la poesía.
"Poesía"
Eliminarla que limpia mi mente y la hace más liviana
más resistente a las acometidas del invierno
a las palabras nocivas de seres que no aman
que deambulan por los nuevos caminos e inservibles,
dejándonos huérfanos de sueños humanos mientras
el lince el águila nos deja su eufonía que implacable
penetras en nuestros corazones con la fuerza de tus letras;
letras de oro e incienso, versos que saben a coplas
las que merodean por las aguas del estrecho
depositando sus letras en la arena del recuerdo.
Un beso
Ainsss mi querido Poeta, amigo antonio, qué bien me hace leerte, y es que tu poesía hace resplandecer mis ojos, gracias siempre por ser luz y poesía, belleza y latido, arte y vuelo, así entre tus letras me quedo para volar entre ellas.
EliminarUn beso, mi admirado Poeta.
Poesía la que brota tu latido,
la que se escurre por tus poros,
la que se exalta por tu brisa,
poesía la que prende tu sangre,
la que hierve hasta las arterias
que recorren tu cuerpo.
Y a mí me ha gustado me hayas dicho lo que más te haya llegado, en ese caso, ese verso que recalcas, muchas gracias, Julio David.
ResponderEliminarMe encanta haberte hecho viajar con mis letras por mi otoño, por el bosque y por la ciudad, y también por la nostalgia sentida, un placer para mí.
Besos enormes.
"que renacen cada día"
ResponderEliminary que vuelven a emerger
desde la noche florida
la que mi cuerpo poso
en una tarde muy negra
cuya negrura denotan
los dedos y mi sonrisa
ya que la luz volvió
de nuevo a alumbras
la noche negra del día.
Un beso
Y más gracias, mil gracias más, por volar en mi blog, y adornar con la luz de tus palabras mi rinconcito, mi buen amigo antonio, me encanta saber que te estás recuperando y puedo verlo a través del fluir de tu poesía.
EliminarMás besos.
La luz de tus palabras
renace cada día,
alumbrando con tus versos,
cada rincón de mi blog,
así letra a letra,
palabra a palabra,
como un diamante,
se desliza la belleza.
"palabra a palabra"
Eliminarverso a verso, nos encontraremos
en la fuente del Mirlo donde el sol
se abraza que, hasta el agua se abraza
desde la humildad, es más tierno su sabor,
donde la luz del fuego quema su corazón
el intrépido guerrero, que busca sin
soñarlo, la fluidez de sus besos.
Un beso
Letra a letra,
Eliminarsílaba a sílaba,
caricia a caricia,
beso a beso,
se entremezclan las palabras,
se enlazan las poesías,
se iluminan las almas.
Mil gracias por versar en mi rinconcito que lo iluminas con tus bellos poemas, amigo antonio, gracias siempre por estar y por ser poesía entre la mía.
Besos.
"se enlazan las poesías"
Eliminarcual argollas insoldables. Divinas
cadenas que surten las minas las
que almacena el hierro que brota
del alma mía la que sucumbe placida
y serena entre tus letras, mezcla
entre surcos y líneas, dejando ir
las plegarias las que incansables
se cuelan por las travesías, trincheras
que no hacen agua, ni viento
por la derive, encauzadas en su vida.
Un beso
Y las letras se enlazan,
Eliminary meciendo melodías,
desde los corazones
hasta las pieles,
y todo fluye
entre sinfonías latidas.
Gracias de nuevo, mi buen amigo antonio, por ser poesía en mi mirada, por tantos regalos versados bellísimos como me regalas, me siento mecida contigo, gracias mil veces.
Un beso.
Hermosos versos sobre el otoño. Aunque es una estación triste, como tú muy bien dices, llena de nostalgias, lo cierto es que tiene su encanto. A mí me gusta. Es como la primavera, pero su opuesto. Ya sabes, como el yin y el yan. Todo ese juego de colores, rojo, amarillo, marrón, verde, que cubre los árboles en esta época, no desmerece en nada a los colores primaverales. Y esa lluvia de hojas cuando sopla la brisa fresca. Lo único malo es que, en la ciudad, las aceras se hacen muy resbaladizas y las hojas ocultan los agujeros que se hacen, y la gente se cae por menos de nada. Pero, en el campo, precioso. No sé, a mí me gusta. El invierno ya no, esa sí que me parece una estación triste, seca, fría y helada, tal como tú lo expresan tan bonito en tus letras.
ResponderEliminarBueno, como tenemos que pasarlas como mejor podamos, pues lo ideal es hacerlo compartiendo reflexiones, ¿verdad?, al calor de nuestras letras. Muchos, muchos besos
Ya estás llegando a la meta, Isidoro, te lo agradezco un montón el interés que has mostrado por las entradas hasta llegar casi a las últimas que he publicado, muy agradecida.
EliminarParece que a ti te gusta el otoño, por el colorido que tiene, colores ocres que cubren la naturaleza y la embellecen, tú lo ves de esa manera, en cambio, yo lo veo desde el otro lado más negativo, ver que los árboles dejan de tener vida porque las hojas se marchitan y caen el suelo, y ¿sabes? qué ponco me gusta ver las calles tan sucias con las hojas secas en el suelo, debo ser una maniática jajaja no lo sé, pero además como dices, hay personas que se resbalan y caen al suelo, o sea, que además, hay inconvenientes, pero no solo eso, sino el horario a mí me mata, que se anochece tan pronto, se me junta el día con la noche y no se puede disfrutar de las tardes que parecen noches, no me gusta ni el otoño ni el invierno, me parecen estaciones nostálgicas y frías, yo soy de verano, tal vez influya el que haya nacido en verano.
Pero tienes razón hay que pasarlas, y no queda otra, nos guste o no nos guste, pero siempre está bien compartiendo nuestras letras diciendo lo que nos agrada o no, el que los demás te hagan ver las cosas que puede haber bonitas de esta estación.
Besos enormes.