Jorge y Ana se habían casado hace tres años. Los jóvenes estaban muy enamorados, y su proyecto de vida a corto plazo era tener hijos. No los habían tenido antes por su inestabilidad laboral que no les permitía pagar la hipoteca ni tener horario conciliador para poder formar una familia. Y ahora que, por fin, tenían contratos indefinidos en sus respectivos trabajos, era el momento ideal.
Pero la vida se puso en contra de ellos. Ana llevaba una temporada que no se encontraba nada bien, y había acudido a varios especialistas de la sanidad pública, sin que le encontraran nada anormal. Por lo que, Jorge, decidió llevarla a una clínica privada. Fue cuando en una de las pruebas específicas encontraron lo que tenía: un tumor agresivo en el páncreas con metástasis.
En aquellos momentos no podían dar crédito a las palabras de los Doctores cuando les dijeron que le daban un pronóstico de vida de dos meses.
Después de varias semanas de sufrimiento y agonía, falleció Ana. Jorge sumido en el pozo del abismo, no pudo superar la muerte de su amada, para él la vida ya no tenía sentido. Todo le recordaba a Ana, con cada paso que daba, y todos sus proyectos estaban relacionados con ella.
Por lo que, nublado en la tristeza, decidió acabar con su existencia en la misma habitación en la que ambos tanto se habían amado.
Ató su cuello con una soga que colgaba de la lámpara, retiró la silla, y allí acabó ahorcado en la habitación del amor. Su alma se reencontraría con ella. Tal vez, ambos por fin, podrían formar la familia que tanto habían deseado al otro lado de la vida.
Que cambio más radical y triste.
ResponderEliminarUn Romeo y Julieta.
Aunque por otras circunstancias.
La vida es cruel con muchas personas que amándose no pueden tener una vida e común, ellos al menos se amaron por un tiempo compartiendo sus vidas, hasta un desenlace fatal.
María una triste muy triste historia.
Un besote y abrazo.
Cuando había llegado el momento para ellos, que lo tenían casi todo, incluso, las puertas abiertas de la juventud, de un momento a otro, la vida se les truncó. Es horrible cuando los jóvenes tienen ilusiones para formar una familia, cuando tienen una vida por delante, y la vida se les rompe de esta manera. Menos mal que es un relato, pero no descartaría que en la vida real pasara parte de ello. Me duele pensarlo, Campirela. Pero así me salió la inspiración.
EliminarUn beso enorme.
Eso sí que es un cambio o mejor dicho, una decisión radical y trágica, pero la razón se nubla cuando el dolor del alma es insoportable.
ResponderEliminarBesos dulces, María Dorada.
Un cambio radical porque la vida se les rompió a los dos, cuando sus espectativas eran otras. Y lo que les llegó fué la muerte. De lo blanco a lo negro de un momento a otro, Dulce.
EliminarBesos.
Efectivamente se trata de un cambio radical, como es la muerte de la persona amada.
ResponderEliminarHay que logran recuperarse, pero Jorge no resistió la perdida de Ana.
Besos especiales.
En la vida no se puede saber lo que nos depara de un momento a otro. Está visto y comprobado que no se puede pensar en lo que podrás hacer en un futuro porque luego sale todo lo contrario de lo que proyectaste, por eso mejor, vivir el día a día, Demiurgo, ese es mi lema. Y sí que hay que lograr recuperarse de las pérdidas, porque no queda otra, lo que no se debe hacer es lo que hizo el protagonista.
EliminarBesos especiales.
La vida sólo es vida cuando merece ser vivida, de lo contrario es un peso que nos arrastra...
ResponderEliminarPero no estoy de acuerdo en que la mejor opción sea quitarse la vida, Beauséant, aunque la vida sea un peso que nos arrastre. No queda otra que continuar, intentando salir del duelo, porque, tarde o temprano, se sale.
EliminarUn abrazo.
María,
ResponderEliminarteu texto é profundamente comovente um mergulho doloroso e humano no amor que ultrapassa a própria vida. Há nele uma ternura trágica, uma entrega que não cabe nas fronteiras da existência. Jorge e Ana são o retrato de tantos amores interrompidos antes do tempo, daqueles que a vida corta pela raiz, mas cuja seiva continua correndo em silêncio, no além e na memória.
A história nos confronta com a fragilidade do que temos como certo o trabalho, os planos, o “momento ideal” — e mostra, com delicadeza cruel, que o destino não segue a nossa lógica. É impossível ler sem sentir o peso da ausência e, ao mesmo tempo, a beleza de um amor que não aceita se apagar.
Teu texto deixa no ar uma pergunta : até onde o amor deve seguir o outro? É uma narrativa que fere e consola como se dissesse que, mesmo na morte, o amor insiste em permanecer, tecendo sua própria eternidade.
Com emoção e respeito,
Fernanda
Muy interesante la reflexión que haces sobre el relato, Fernanda, bien cierto es que, de un momento a otro, se pueden truncar todos los planes. No podemos pensar en un futuro porque no existe, y la prueba está cuando tuvimos la pandemia, un ejemplo que me ha venido a la mente. Mejor es vivir el día a día, y disfrutar de lo que poseemos, y no hacer castillos en el aire. Es una verdadera pena, que todo se haya derrumbado. Dos jóvenes que tenían la juventud por delante, y un futuro prometedor. ¿Para qué? para que luego la enfermedad te arrebate al ser querido. Qué horror. Solo de pensarlo me duele el alma. Muy interesante la pregunta reflexiva que haces, querida Fernanda. Yo creo que no se debe seguir hasta la muerte, ni con todo el amor que exista. Se debe continuar. Se debe superar el duelo. Porque no queda otra. Pero no arrastrarse hasta la muerte, porque seguramente ella hubiera querido que él siguiera adelante, que rehaciera su vida.
EliminarBesos enormes.
Querida María,
EliminarConcordo contigo a vida pode mudar num sopro, e por isso mesmo é preciso vivê-la no presente, com gratidão e inteireza.
A pandemia realmente nos mostrou o quanto somos frágeis e o quanto o “depois” é apenas uma promessa. Também creio que o amor verdadeiro deseja continuidade, não prisão ele quer ver o outro seguir, florescer novamente, mesmo depois da dor.
Teus pensamentos completam lindamente a reflexão.
Um beijo cheio de carinho e luz.😘
Gracias, de nuevo, querida Fernanda, por venir a charlar un ratito conmigo, me encantan estos momentos. Y me gusta tu reflexión, cuando dices que el verdadero amor anhela la continuidad, así debe ser, seguir adelante, aunque cueste mucho, pero siempre después de la lluvia, saldrá el sol, y hay que intentar florecer de nuevo, no podemos vivir eternamente en el duelo, porque la vida es corta, y hay que vivirla, aunque cueste a veces tanto por la pérdida de los seres queridos.
EliminarBesos enormes.
Un relato muy triste nos ofreces hoy, en el que si hubieran tenido hijos, la historia cambiaría seguramente...
ResponderEliminarUn buen relato con una perfecta redacción.
Aferradetes, María.
No se pueden hacer planes en esta vida, Paula, porque el futuro no existe, aunque exista ilusión y proyectos, pero en cualquier momento todo se puede derrumbar, de un segundo a otro, porque tenemos la vida alquilada, no nos pertenece.
EliminarBesos.
Tan bueno como descorazonador relato. Tu adaptación al reto no ha podido ser más fiel.
ResponderEliminarBesos.
Este sí que fue un cambio radical, Macondo, como de la noche al día.
EliminarBesos.
Que duro resulta tan sólo imaginarlo. Una historia en la que retratas el amor en su forma más humana y dolorosa: la entrega total, la pérdida irreparable y el vacío que deja la ausencia. Un abrazo
ResponderEliminarMuy bien resumido el relato, con esos conceptos, Emilia. El amor puede arrastrarnos a hacer verdaderas locuras, cuando se llega a perder a la persona amada, pero menos mal que, con el tiempo, todo llega a su calma, porque el duelo no puede ser eterno.
EliminarUn abrazo.
Ohh qué pena!
ResponderEliminaresas pérdidas irreparables en la flor de la vida!
Con qué delicadeza nos lo has contado María..
Precioso!
Un beso grande.
Qué duras son las pérdidas por amor, lunaroja, tú bien lo sabes, pero no queda otra que continuar, y que ellos sigan en nuestro corazón.
EliminarUn beso.
Esta vida es así, nada es para siempre, ni los momentos felices ni los más horrorosos. No se nos prepara para ello probablemente y tenemos la piel tan fina que no somos capaces de superar lo malo, o quizás sea que el amor mueve montañas, el caso es que una historia dulce se puede convertir en amarga en cuestión de minutos.
ResponderEliminarBss
Qué razón tienes en lo que dices, Lola, que nada es eterno, en esta vida, solo podemos contar con los instantes presentes, y no podemos pensar en el mañana porque no existe. Y además, tenemos que afrontar todo lo que se nos presente, por todo el amor que nos profesemos, la vida hay que cursarla, y el duelo hay que pasarlo.
EliminarBesos.
Guion para una
ResponderEliminarpelicula...y de
exito.
No creo que sea para tanto jajaja, Orlando, pero sí que sería una peli muy triste, no quisiera verla, porque yo soy de lágrima fácil.
EliminarBesos.
Tan radical como triste, un final muy desgarrador, dos personas con un futuro abierto sufren un golpe mortal. Abrazos
ResponderEliminarTotalmente radical, Ester, tan dual como lo es la vida, blanco y negro, noche y día, verano e invierno, risas y lágrimas.
EliminarUn abrazo.
Quando o amor cega, o coração obedece ao instinto da sobrevivência já que ele não aceitava a volta que o destino aprontou . E por mais sugestões que se deem , ninguém pode julgar !
ResponderEliminarUma narrativa aberta para tantas hipóteses
Gostei , Maria
Beijinho
Muy buena tu conclusión, manuela, me ha encantado lo que has dicho. El protagonista no aceptó el destino atravesado que se le presentó, y tomó un giro radical. Qué razón tienes que no podemos juzgar, porque no somos Jueces. Cada uno sabe por qué hace sus actos, y carga con sus consecuencias.
EliminarBesos.
Lo malo es que nada hay al otro lado así es que la decepción fue de órdago. Pero algo de bueno si que se puede decir que hay; ya que la materia ni se crea ni se destruye, solo se transforma.
ResponderEliminarJajajaj me has sacado sonrisas Erik, con lo que dijiste de que la decepción fue de órdago porque no hay nada al otro lado. Aunque yo también pienso lo mismo, quisiera creer que algo puede haber, aunque solo sea una ilusión.
EliminarBesos.
El relato duro, pero realista. Aquí, en Colombia, se dan casos frecuentes de novios o parejas que no superan la muerte del oltro o la otra, justo cuando encontraban el momento ideal que juntas sus vidas. UN abrazo. Carlos
ResponderEliminarQué triste que sea así, Carlos, imagino que no sólo lo habrá en Colombia, que también lo habrá en todos los rincones del mundo, que cuando llega el momento todo se trunca por una enfermedad o muerte, eso es lo peor que nos da la vida, ójala se tratara tan solo de un relato.
EliminarUn abrazo.
Olá, querida amiga Maria!
ResponderEliminarNossa! Realmente criou um curso do conto extremamente diferenciado.
Acabar com a vida não é boa solução se a antecipamos, mas, no conto, foi uma construção diferenciada.
Tenha dias abençoados!
Beijinhos fraternos
Qué razón tienes, querida Roselia, que esa no es una buena opción, la de suicidarse, pero se me ocurrió en el último momento dar ese giro radical. Porque en verdad, el giro que quería dar era el cambio de proyectos, pero a última hora se me ocurrió ese final tan trágico.
EliminarBesos enormes.
a veces la vida se enterca en que una persona (o una pareja) no lleve a cabo sus planes más deseados y al final todo puede terminar en tragedia.
ResponderEliminarun beso.
Qué razón tienes, DRACO, a veces la vida da un giro inesperado a las personas, truncando todos los proyectos, y lo peor de todo, es cuando se trata de enfermedades terminales o muertes.
EliminarUn beso.
merci bonjour un bon mercredi bisous
ResponderEliminarGracias, tarzan, igualmente para ti.
EliminarUn saludo.
Quizás en otra vida tengan mejor suerte.
ResponderEliminarOjalá.
Besos.
Eso quisiera creer, TORO, que tal vez puede que haya otra vida, pero me temo que no es así.
EliminarBesos.
Buen relato como siempre Maria,lamentablemente tu historia sucede mucho mas de lo que imaginamos,el amor con sus diferentes caras a veces no soporta la realidad.Te dejo un gran abrazo!
ResponderEliminarQué razón en lo que dices, Menta, el amor tiene tantas caras y a veces tan duras, capaces de llegar hasta tales extremos.
EliminarUn abrazo enorme.
Qué tremenda historia... pero con un bonito final, esa esperanza que enlazas con otra vida...
ResponderEliminarA pesar de lo trágico, el amor pervive en el más allá...
Feliz día, María, besos mil
Qué bonito y dulce lo que dices, Milena, esa esperanza al otro lado de la vida, el amor hasta la eternidad.
EliminarMuchos besos.
Hola María,
ResponderEliminarTriste y desesperanzador relato. ¿Podemos considerar un punto y final como un cambio? Es verdad que la vida es tan injusta como la muerte y que ambas se encargan de triturar ilusiones y esperanzas.
Un saludo.
Así es la vida, LUFERURA, tan injusta, de la noche a la mañana todo puede cambiar. Ese fue el punto final, el suicidio del protagonista. Pero no solo debemos fijarnos en lo último. Desde el principio fueron surgiendo grandes cambios. Cuando ambos habían decidido formar una familia, y todo se vino al garete, con la enfermedad y muerte de su amada, ese fue el primer cambio radical, la vida les jugó una mala pasada que trastocó al protagonista.
EliminarUn saludo.
Conmovedor, María. La forma en que narras el amor profundo entre Jorge y Ana, y cómo la vida les arrebata sus sueños justo cuando estaban a punto de florecer, es desgarradora. Has capturado con gran sensibilidad el dolor de la pérdida y esa desesperación que puede nublar toda esperanza. El final, aunque trágico, deja una estela de ternura y de amor eterno que trasciende incluso la muerte.
ResponderEliminarGracias por compartir una historia tan intensa y humana.
Un abrazo lleno de admiración.
Parece un amor como el de Romeo y Julieta, ¿verdad Enrique? tal vez haya tantos amores así que con la muerte de uno de ellos, el otro no quiera seguir viviendo. Aunque a veces, la muerte no solo puede ser física. Podemos estar muertos en vida, cuando se pierde el interés por todas las cosas, cuando la vida se vive cuesta arriba cada día, porque cuesta levantarse sin ilusión, esa es otra especie de muerte. Pero en este caso, le llevó a ese extremo a Jorge, debido a su extrema sensibilidad que no pudo continuar, no tuvo fuerzas para salir del pozo del abismo. Tal vez, allá puedan reencontrarse, al otro lado de la vida, para seguir disfrutando eternamente de su amor y llevar a cabo sus proyectos.
EliminarUn abrazo enorme.
Jorge foi mesmo radical e a mudança de planos, com a orte de Ana o enfraqueceu. Achou não resistir e não resistiu de verdade. Tirou sua vida! TRISTE ! beijos, tudo de bom,chica
ResponderEliminarUn cambio radical para la vida de ambos, cuando murió Ana, todos los planes se vinieron abajo, y el siguiente cambio radical fue no desear seguir viendo Jorge, la muerte les arrebató sus proyectos, ilusiones, un futuro, chica.
EliminarBesos.
Un relato impresionante y conmovedor que refleja lo cruel que es la vida muchas veces.
ResponderEliminarTriste historia.
Un beso.
Feliz Noviembre.
Es lo más penoso que puede pasar en la vida, cuando se es joven, con proyectos e ilusiones, y que la muerte toque a la puerta para arrebatarlos la vida, AMALIA, cuántos casos habrá así, es muy triste.
EliminarBesos.
Hola María. Un relato triste, muy triste, el que nos dejas.
ResponderEliminarCuando mejor se las prometían surge lo imprevisible y todo se derrumba, aunque el final de Jorge, no creo sea el más adecuado. Hay que vivir, aunque sea con el recuerdo de su amor. Es darse por vencido, es tirar todo por la borda y no creo que Ana se mereciera esa respuesta, pienso que debía estar más alegre, viéndolo, desde donde quiera que se encontrara, con vida y sabiendo que pensaba en ella que no de la forma como acabó.
Casa uno puede pensar como quiera.
Un abrazo.
Me encantó tu reflexión, Juan. Y además, yo pienso lo mismo que tú. No creo que a Ana le hubiera gustado lo que ha hecho Jorge, basta que a ella la muerte se la llevó, que lo que tenía que haber hecho sería haber seguido luchando. Porque aunque una persona se vaya físicamente, la podemos seguir sintiendo igual desde el recuerdo en el corazón, dónde siempre permanecerá. Y por ella, tendría que haber seguido viviendo. No hay que rendirse ante las adversidades, sino todo lo contrario, son las que nos fortalecen para seguir creciendo.
EliminarUn abrazo.
Qué radical y duro, María, pero a la vez posible!!
ResponderEliminarBesicos muchos.
Tan radical como lo puede ser la misma vida, Nani, que en un instante, la vida se puede volver en contra.
EliminarMuchos besos.
Olá Maria,
ResponderEliminaré muito triste quando não conseguimos realizar
nossos sonhos e a vida se transforma em um pesadelo.
Da uma dor no coração. Tudo vira escuridão.
Te desejo uma feliz noite,
♥beijos
Eso es lo peor, cuando la vida se convierte en una pesadilla, y todos los proyectos se quiebran, como la propia vida, hasta doler el alma, Bandys.
EliminarBesos.
Hola María, es un relato realmente triste, como la vida misma, es una enfermedad horrible realmente, yo que perdí a muchos seres queridos a causa de él, doy fe de ello, empezando por mi madre, mi tía, mi abuelo y muchos más, sin ir más lejos ayer mi prima hermana y todos a causa del cáncer.
ResponderEliminarUn abrazo
PATRICIA F.
Es horrible cuando se pierde a los seres queridos a causa del cáncer u otra enfermedad, PATRICIA, creo que todos hemos tenido familiares que han fallecido por la causa que sea, lo peor de todo, es cuando son tan jóvenes que les queda toda una vida por delante para vivir, aunque bien cierto es, que todas las muertes duelen mucho, tengan la edad que tengan, todas son dolorosas.
EliminarUn abrazo.
El tipo carecía de resiliencia.
ResponderEliminarHas dado en el clavo, Cabrónidas. Una persona que toma esa decisión es porque no se adapta a las adversidades que se le presentan en la vida. Debemos gestionar las emociones, y aprender a superar el dolor, porque el duelo no puede durar toda la vida. El ser humano está capacitado para sobrevivir y adaptarse a las circunstancias de la vida. Lo que no todos lo hacen cuando caen en una profunda depresión, lo que deberían hacer es acudir a un especialista que les ayude a salir de ese abismo.
EliminarUn saludo.
jajaja Cariiiiiño, esto no es un cambio radical en la vida ..esto es ..terminar con ella ; ) Efectivamente más radical no se puede ser, un dramón de libro ! pobres! Sin embargo a mi me parece q estas decidiones tan tremebundas nunca son fruto de un sentimiento , son fruto de la enfermedad mental q a veces genera el sufrimiento , por eso hay q aprender a gestionar lo q nos sucede , nunca es fácil asumir una pérdida , mucho más si es con quien compartimos un proyecto de vida, pero hay q intentarlo y buscar ayuda si no somos capaces, previamente este sábado enterramos al marido de una amiga íntima a quien su marido de poco más de 50 años cayó fulminado de repente hace cinco días , como ves, es un asunto q me toca muy de cerca y por eso hablo así, espero q mi amiga con tiempo,todo nuestro apoyo, cariño y lo q sea q necesite, consiga superarlo ... cuanto estás en esa niebla oscura parece imposible, pero lo es, la vida sigue reservando maravillas a quien se sobrepone a los golpes y lucha por seguir disfrutando de ella ...tiempo, sólo él amortigua los golpes...un besazo cielo !
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo, querida tocaya, y más arriba lo he comentado, que hay que saber gestionar las emociones en esta vida que nos trae un poco de todo, saber adaptarnos a las circunstancias que se nos presenten, y como he dicho antes, si se cae en una depresión, pedir ayuda a un especialista para salir de ese pozo oscuro. Tenemos que saber salir y superar las difíciles experiencias, que son las que nos fortalecen. Sobre todo las pérdidas, que duelen tanto al principio, pero todo tiene su tiempo, porque un duelo, no dura toda la vida. Siento mucho lo del marido de tu amiga, seguro que con tu cariño ella se reconfortará algo.
EliminarUn beso enorme.
A vida faz-nos deparar com surpresas muito desagradáveis, sendo que, a que refere, tem uma carga trágica. de contornos verídicos mas, mesmo assim, chocantes.
ResponderEliminarAbraço de amizade.
Juvenal Nunes
Tienes razón, Juvenal, sí que es impactante el final, y también tiene algo de real el relato. Porque la vida es una caja de sorpresas. De la noche a la mañana pueden surgir tantos imprevistos, incluso, de un segundo a otro, todo puede derrumbarse.
EliminarUn abrazo.
TRISTE
ResponderEliminarSí lo es, Ricky.
EliminarUn abrazo.
En un instante todo se quiebra. Es duro tu relato como lo es a veces la vida, dura.
ResponderEliminarUn beso.
Totalmente cierto lo que dices, CARLOS, la de cosas que pueden pasar de un instante a otro hasta quebrarse la vida. Muy duro.
EliminarUn beso.
Fuerte relato, la vida de alguna manera nos muestra cosas.
ResponderEliminarAbrazo
La vida es una auténtica caja de sorpresas, lanochedemedianoche.
EliminarUn abrazo.
Hola María.
ResponderEliminarQue lástima de vida. Cuando una pareja enamorada tiene planes y proyectos para formar una familia. Muy oportuno fue el golpe más fuerte por el que pasaron los dos. La enfer de Ana y el suicidio de Jorge.
Un relato sumamente intenso y de actualidad.
Un abrazo enorme.
Mónica.
Es es lo peor de todo, Mónica, cuando dos personas se aman y están proyectando su futuro porque ya lo tienen todo estable, y el último paso era formar una familia, la vida les pone la peor de las zancadillas en el camino. Terrible.
EliminarUn abrazo.
Ohhh qué historia más dura y triste, María! Nos dejas con la única esperanza de creer que se hayan reencontrado en el más allá. Un abrazo
ResponderEliminarEso quisiéramos creer, Neogéminis.
EliminarUn abrazo.
Beautiful blog
ResponderEliminarGracias, Rajani.
EliminarUn beso
Please read my post
ResponderEliminarRajani, gracias por tu información. Pero cuando quieras puedes leer mi publicación y comentarla.
EliminarOtro abrazo.
María nos planteas una historia con circunstancias muy realistas...Cuántas parejas y familias se ven sorprendidos por una noticia que puede ser una enfermedad, una muerte o una desgracia y ello les cambia la vida...!! Vivimos en tiempos difíciles, donde lo material reina sobre lo espiritual, por tanto debemos preparar la mente ante la frivolidad y la ilógica de la vida, que nos sorprende en cualquier momento...Es importante tener fe y fortaleza interior para superar los problemas, mirar la vida como una prueba constante y saber gestionar cada circunstancia. Hay que reflexionar, conocernos y tener la resiliencia necesaria para emerger ante las dificultades.
ResponderEliminarMi abrazo entrañable y admirado por tus buenas letras, amiga escritora.
Muy buena reflexión haces sobre el relato, María Jesús, me ha gustado cómo lo has analizado, además, de manera tan positiva, como lo has hecho, querida amiga. Bien cierto es, que la vida nos puede sorprender con una desgracia de este tipo, pero de lo que se trata es de saber afrontar las adversidades. Aunque no todos tienen esa fortaleza, hay personas que son extremadamente sensibles y no pueden salir de ese abismo, hasta tal punto de quitarse la vida, algo que estoy en contra, tomar esa determinación tan fatalista, no me parece lo más adecuado, pero claro, cada uno es libre de sus actos, y no somos quiénes para juzgarlos.
EliminarUn abrazo enorme.
Boa noite, Maria.
ResponderEliminarBonita história de amor, que de repente leva uma reviravolta pelo mais terríveis motivos.
Gostei de ler, estimada amiga.
Deixo os votos de um bom fim de semana.
Beijinhos!
Mário Margaride
http://poesiaaquiesta.blogspot.com
https://soltaastuaspalavras.blogspot.com
Hay historias de amor que no terminan bien, como en este caso, querido Mário, lo peor de todo, es que ambos, de una manera u otra, perdieron la vida, aunque tal vez, en el más allá se encuentren sus almas, y puedan cumplir sus deseos.
EliminarBesos.
Qué historia tan triste. Jorge y Ana se querían mucho y soñaban con tener una familia, pero la enfermedad de Ana lo cambió todo. Cuando ella murió, Jorge no pudo seguir adelante sin ella. Es un relato muy duro, que muestra cuánto puede doler el amor cuando se pierde. Gracias por compartirlo, María.
ResponderEliminarUn abrazo.
Así es, Jordi, como bien dices, cuánto puede doler el amor cuando se pierde. La enfermedad y muerte de Ana lo cambió todo, y él ya no deseaba seguir viviendo. Muy triste el relato, y muy duro.
EliminarUn abrazo.
Tremendo relato que te deja el corazón metido en en puño cuando lo lees.
ResponderEliminarUn cambio radical, lo más radical que se puede dar.
Qué tristeza me queda.
Un beso
Así es, Tracy, un cambio totalmente radical, y lo peor de todo, es que te deja el cuerpo mal, por lo triste que es, pero es lo que me inspiró.
EliminarUn beso.
bela narrativa, gostei muito! bjs
ResponderEliminarGracias, Ana.
EliminarBesos.
Tremendo y escalofriante María, especialmente para mi que me han detectado un tumor pequeño y en el mismo sitio, aunque afortunadamente es benigno pero ya está sugeto a seguimiento y control, se puede imaginar el tiempo que he pasado hasta tener los resultados definitivos.
ResponderEliminarUn abrazo
Me imagino lo que habrás pasado, José Antonio, esa incertidumbre que produce cuando te detectan un tumor, hasta que te dicen si es benigno, menos mal que ha sido así, y que estás controlado, verás como todo irá genial. Gracias por tu sinceridad en contarnos tu experiencia.
EliminarUn abrazo.
Demoledor en muchos sentidos. Una historia que bien podría ser la de cualquiera, puesto que el cáncer es ese invitado incómodo que nadie desea y que de un modo u otro puede irrumpir en nuestras vidas.
ResponderEliminarTu relato me ha recordado mucho a un caso real con cáncer mortal para ella. La única diferencia es que él, aunque desgarrado por el dolor de la pérdida, siguió adelante.
Un abrazo enorme.
Como bien, dices, Rebeca, es una historia que puede ser la de tantas personas que han pasado por lo mismo, cuando se detecta una enfermedad incurable y que no hay nada que hacer, es terrible, pero lo peor de todo es que él no supo gestionar sus emociones. Me recordó a un caso real que conocí, que él terminó suicidándose porque a su mujer le diagnosticaron un cáncer y él no lo supo gestionar bien, pero en este caso, ella sigue vive venció la enfermedad, y él no pudo con ese trago tan amargo. En ese caso, ella fue la enferma y la valiente. Me alegra volver a leerte, preciosa.
EliminarUn abrazo enorme.
Hola María. Los diagnósticos médicos sobre enfermedades terminales pueden acabar en tragedia, sin duda, el fin de la existencia del paciente. Ahora bien, en una pareja afectada por una situación de enfermedad crónica opino que una enfermedad malignizada no tiene por qué suponer un estrés tan grande y de consecuencias tan graves en el otro. Antes habrá actitudes que a buen seguro contendrán a las emociones negativas para hacer frente de forma valiente a la situación. Tu relato describe a la perfección la situación más extrema de forma impactante y que pone la piel de gallina. Al leer el final he sentido un escalofrío.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu aportación a este reto, María.
Un abrazo
Como acabo de comentar más arriba, a Rebeca, conocí un caso real, del marido de una enferma de cáncer, que no pudo soportar la enfermedad de su mujer, y acabó suicidándose, en cambio, ella, logró vencer la enfermedad, y sigue vive. Aunque en el caso del relato, fueron ambos los que murieron. Pero hay tantas historias parecidas en la vida real. Lo que yo también pienso que no se debe llevar a consecuencias tan graves, como bien dices, Marcos, pero no todos pensamos lo mismo, como tampoco somos jueces para opinar de nadie. Cada uno conoce bien sus circunstancias. Un placer haber participado en tu convocatoria, Marcos.
EliminarUn abrazo.
Igual de bello que de escalofriante. Muy real.
ResponderEliminarUn besazo!
Gracias, Morella.
EliminarUn besazo.
Una triste historias nos regalas María donde se nota el cambio radical en el vuelco de la historia de amor cuando le diagnostican el cáncer a Ana. Un buen aporte a la convocatoria.
ResponderEliminarDejo volar la imaginación y me imagino que el cáncer fue producto de una depresión al no poder cumplir su sueño de tener hijos, porque dicen que el cáncer de páncreas puede estar asociado con un significado emocional de depresión y ansiedad, ya que el páncreas está relacionado con la producción de hormonas que regulan el estado de ánimo.
Que tengas un hermoso día
Besos
No sabía que el cáncer de pancreas era debido a la depresión y ansiedad, tengo que decirte que varios familiares cercanos a mí fallecieron de un tumor de páncreas, y tambén conozco a otras personas que murieron de lo mismo. No sé si influirá la genética, o como dices tú, pueda ser debido al estado de ánimo. Me has dejado pensando. En el caso de la protagonista no estaba deprimida, todo lo contrario, estaba feliz e ilusionada porque deseaba tener hijos con su amado, sino los habían tenido antes era, no porque no pudiera tenerlos, sino porque no tenían una estabilidad laboral. Por cierto, me falta leer tu relato, Ezequiel, en breve me pasaré.
EliminarBesos.
Admiro mucho la capacidad de escribir historias cortas. No es para nada fácil lograr impactar en unos pocos párrafos.
ResponderEliminarHermoso, felicidades.
Gracias por visitar mi blog, Martín, acomódate que estás en tu casa, y vuelve cuando quieras.
EliminarUn saludo.
Olá, amiga Maria.
ResponderEliminarPassando por aqui, para desejar uma feliz semana, com tudo de bom.
Beijinhos!
Mário Margaride
http://poesiaaquiesta.blogspot.com
https://soltaastuaspalavras.blogspot.com
Qué amable eres, querido amigo Mário, muchas gracias por tus saludos. Igualmente para ti, te deseo una feliz semana.
EliminarMuchos besos.
bella Maria, un relato que da escalofrío, toda una vida por delante, proyectos tienen un fin desbastador.
ResponderEliminarTriste pero muy bueno el relato.
Un placer leerte siempre.
Besos bella, que pases un feliz día
Es una pena que cuando se tiene toda una vida por delante puedan suceder estas cosas, que aunque es un relato, en la vida real también suceden estos hechos, Mathilde, que la vida se pueda volver en contra de uno mismo.
EliminarUn beso enorme.
Las palabras bien cosidas a esas líneas fortuitas o agresivas, se hacen metáforas en tus manos de Diva; mente generosa de esa sabía que se engrandecen con acierto en todo lo que nos enloquece, llevados por el sustento que provocan los recuerdos los que están instalados en el armario antiguo o ropero sin baldas o arcón con cerradura muy antigua de maderas muy negras por el tiempo, cuya llave llevamos en nuestro cuello, colgada de una cuerda ya muy negra de tantos recuerdos, hoy ya bien seguros, los que nos hacen vibrar por dentro.
ResponderEliminarUn placer leerte. Un abrazo
Qué cosas más bonitas dices, Antonio, lo importante es disfrutar con lo que nos gusta, y si además, nos enriquecemos leyendo pues mucho mejor, gracias por tus sabias palabras, poeta.
EliminarUn abrazo.
Noooo, yo solo quería leer cosas bonitas
ResponderEliminarLo siento mucho Aina, que te hayas encontrado por primera vez en mi blog un relato tan dramático, tienes razón, es mejor leer cosas bonitas, que bastante tenemos en la vida real como para ponernos a leer textos tan negros. Gracias por tu visita, y espero que a la próxima vez que vuelvas mis palabras sean más bonitas.
EliminarUn beso.
Nos guste o no, es la vida misma. Un relato crudo y al hueso, Dorada. Sin moralejas, sin lecciones, sin esperanzas. Espero que estés bien, pues escribir algo así puede que sea el reflejo inconsciente de querer terminar, acabar, "matar" un aspecto tuyo, o una relación o una responsabilidad, etc. Va un abrazo.
ResponderEliminarJulio David, me alegra volver a leerte, te venía extrañando, espero que estés bien, yo estoy bien, pero a veces, la inspiración viene de esta manera, y no sale otra, imagino que puede influir el otoño, en que los relatos sean de este tipo tan negros, no lo sé, pero yo estoy bien. A lo mejor es lo que dices, que quiera matar algún aspecto de mi vida. No lo sé. Gracias por tu apreciación psicológica.
EliminarUn abrazo.