Aquel regalo mágico para ella era especial... por eso mismo lo guardaba como el mejor de sus tesoros... poseerlo en su mente... en su cuerpo... en su corazón... era como sentirse mecida entre la seda en los cielos de su alma...
Cerraba los ojos... lo acariciaba... lo abrazaba... cuando lo pensaba... sentía tanta calma, serenidad y tranquilidad en su interior... llegaba, incluso, a transformarse en un ave alzando sus vuelos hacia un mundo mágico jamás imaginado... donde todo estaba repleto de luces de todos los colores... el aire que respiraba era oxígeno purificado... en aquel lugar nada estaba contaminado ante la mirada de sus pupilas...
Desde que atesoraba aquel regalo espiritual... se transformaron sus sombras en luces... sus lágrimas en sonrisas... sus pesadillas en sueños... su nostalgia en alegría... sus ahogos en susurros... sus gritos en silencios acunados... su frío en calor... su vida dejaba de ser delirio y muerte... a partir de ahora empezaba a tener sentido...
Con tan sólo pensar en la Ataraxia... ya nada le oprimía... nada le angustiaba... ningún temor sentía... tan sólo reinaba la paz y el bienestar en su interior...
Y se siente ese estado espiritual en tu relato.
ResponderEliminarBesos con dulzura Mi Hada.
Es hermoso poder llenarse de ese sentimiento tan puro como es la libertad y la paz sin que nada nos pertube. Bonitas letras. Besitos
ResponderEliminar¡Y que placer sentir ese bienestar especial que produce quedarse suspendido en un estado de equilibrado sosiego. Lo has definido muy bien. Y muy bellamente.
ResponderEliminarInvocación llena de clasicismo a la ataraxia, una disposición ante la vida que curiosamente se desarrollÓ simultaneamente tanto en Europa (Grecia) como en Asia (India y, creo que también, en China) alrededor del siglo V-IV a.C., si bien con diferentes matices.
Sin embargo, solo comparto en parte esa busqueda de la ataraxia que, en el fondo, es una propuesta de desapasionamiento como vía para conseguir paz y bienestar. Yo creo que hay que apasaionarse. ¡Hasta locamente! Pero hay que elegir aquello (o aquellos) en lo que (quien) entregamos nuestro apasionado vivir.
Cuestión de pareceres, nada más...
Un fuerte abrazo, María. Me ha encantado encontrar tu entrada!!!
Encontrarse, cuerpo y alma. Que difícil de mantenerse así para siempre. Gracias María, mi cuerpo necesita, sentarse a hablar con mi mente...besos
ResponderEliminarEstado de beatitud difícil de alcanzar...
ResponderEliminarBss
Pero hay una luz que siempre
ResponderEliminarestá encendida, un viejo candil
en su añeja mesilla.
Siempre esta vigilante y la llama
nunca se agota, ya que su respiración
está dándole la fuerza de su corazón.
Un beso
Es imperioroso a veces, quedarse en ese estado. Por impedir que los ruidos externos e internos nos avasallen y nos devoren la calma.
ResponderEliminarUn beso.
*mas si en suspenso queda
ResponderEliminarel cargo de alma y cuerpo
feliz seáis, fervor,
entre el encantE!!!!*
((allá que es cerca iré, a gozar silencios, María))
besos
Curioso: siendo equivalente a la "apatía", vinculamos la ataraxia a valores emocionales superiores, mientras que la apatía es asociada a enfermedad…
ResponderEliminarPreciosa entrada, Lady María.
Espero que ese equilibrio logrado no lo pierda nunca tu protagonista.
ResponderEliminarUn abrazo.
La propia anatomía del recuerdo y la melancolía nos hará libres. Un beso, María.
ResponderEliminarSerenidad en la razón y los sentimientos, desde luego un regalo precioso. Saltos y brincos alegres
ResponderEliminarEs difícil mantener la impavidez, ante todo lo que nos rodea.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me he sentido como mecido por el ritmo de tus palabras. Me ha encantado y te felicito.
ResponderEliminarUn beso.
Quizá es más fácil llegar allí de lo que parece...
ResponderEliminarBesos.
Maria... Siempre despiertas mi interés con tus definiciones... Ataraxia, quien utiliza esta expresión!!! Fantástica palabra, ausencia de turbaciones, calma sosiego, no me negaras que los Griegos son los maestros de la filosofía... Realmente con esta entrada te has tomado un descanso...
ResponderEliminarUn abrazo....
Y qué bien transmitido ése estado simplemente de paz interior.... te confieso que siento envidia de la buena... estoy buscando ése estado... pero debe de haberse escondido muy bien.. porque no hay forma de encontrarlo.. aunque cada vez me siento un poco más cerca del carpe diem y de cuidarme sobre todo a mí...
ResponderEliminarUn beso cielo¡¡
Qué difícil entrar en ese estado cuando lo que nos rodea nos lleva al polo opuesto.
ResponderEliminarMagnifico relato!.
Besitos.
Te noto ciertamente epicúrea
ResponderEliminarUUffff que sensación me acaba de dejar tu reflexión me atrapo de princio a fin calma y paz uufff precioso , besos desde mi brillo del mar
ResponderEliminarMe dices en tu comentario que se puede llegar al cielo con mi entrada, también con la tuya se puede llegar, te llena de paz y serenidad, tanto que al leerla me he quedado serena y tranquila.
ResponderEliminarGracias por tu visita, me he alegrado mucho al verte en mi blog, espero que de ahora en adelante sigamos visitándonos las dos.
Besos, te deseo una feliz semana.
Creer es crear, con lo cual...
ResponderEliminarBesos María.
Una serenidad interior que logras transmitir tan bien que me voy en calma, una calma que estaba necesitando.
ResponderEliminarCariños…
¡Qué bien expresas los sentimientos!
ResponderEliminarTu tesoro es mágico.
ResponderEliminarEquilibra el alma quien no se perturba por el deseo y domina el placer en la conciencia.
quien encuentra el punto medio en su interior y se libera de las luchas ante los estímulos placenteros
Me gusta el sentido que le das a las ataraxias en tu relato, porque las ataraxias también puedes ser o estar en un “tesoro mágico” que te lleve a encontrar esa parte no tan espiritual de esta palabra.
Ese equilibrio mágico que te hace enfrentar estados, para encontrar la serenidad y la calma que te lleve al bienestar, pero sin matar la voluntad.
Por cierto me encanta como juegas con las palabras y sus antónimos antes del desarrollo final es muy elegante.
Con el deseo de que tus ataraxias no se perturben jamás me despido con un Beso María.
Así se debe de quedar uno la mar de relajado y tranquilo. Mejor esto que no tomarse zolpiden para poder dormir.
ResponderEliminarBesos María.
Tus letras siempre reflejan con exactitud lo que nos quieres mostrar, hoy sentí calma, calidez, amparo, cariño, luz, mucha luz... y sabes qué? me encantó... cada día te admiro más María, eres única mostrando sentimientos!!
ResponderEliminarMontones de besinos!!
Es importante alcanzar el equilibrio y hacernos fuertes para que nada ni nadie nos lo quite :)
ResponderEliminarMuchos besos
lograr un estado total de paz puede significar la respuesta a muchas interrogantes. Interesante prosa amiga. Un beso.
ResponderEliminarMaría, el equilibrio interior es el mejor de los regalos y debemos cuidarlo, acariciarlo y sentirlo...No siempre lo conseguimos, pero nos puede ayudar la música,la lectura, la reflexión y tantas cosas que proporcionan al alma serenidad y calma...En este momento, tu post consigue, que sintamos esa plenitud de la paz y de saberse vivo y en contacto con la naturaleza, la mejor de las maestras.
ResponderEliminarMi felicitación y mi abrazo inmenso por tu buen hacer,amiga.
M.Jesús
¡Ay, María!!!
ResponderEliminarGenial genial, fantástica entrada es un texto poético fuera de serie. No recuerdo haberte leído al tan bello.
Ni enhorabuena mi felicitación y mi estima siempre.
Bueno, sin menos preciar, ni mucho menos, todos tus post eh. Sabes que me encanta todo lo que escribes.
Besos azules en vuelo.
Mi enhorabuena. Quise decir.
ResponderEliminarUn solo pensamiento nos puede producir estos estados de plenitud.
ResponderEliminarLo has transmitido muy bien, María.
Besos
Maravillosos esos momentos en que encontramos la paz espiritual, la paz con nosotros mismos, y conseguimos relajar cada una de nuestras neuronas y nuestros sentimientos.
ResponderEliminarBesos
Una preciosura María . Tus palabras y esa imagen bellísima .
ResponderEliminarBesos de miel
¡Feliz día !
Boa tarde, todos nós temos a magia de apreciar e sentir, foi bom ler a sua bela escrita.
ResponderEliminarAG
http://momentosagomes-ag.blogspot.pt/
Tranquilidad, serenidad e imperturbabilidad en relación con el alma, la razón y los sentimientos. Eso solo se reconoce después de lo más.
ResponderEliminar¡Qué bonito es leerte y sentir tus palabras!
Un lugar lejano dentro de nosotros mismos. Se entra en estado zen al leer tu entrada, María.
ResponderEliminarMil besitos otoñales.
Ha sido un placer para mi venir a visitarte devolviendo la tuya tan cariñosa ...pero tu entrada es tan hermosa yllena de serenidad... palpitante al corazón ... a esa
ResponderEliminarpalabra de imperturbalidad... sosiego y deseo de tranquilidad.
Yo me salgo con el deseo de volver a buscar en tus palabras alegria... sosiego y tranquilidad...
besos querida Maria muchos...
Marina
Cuando tienes la paz en tu interior, podras ver las señales mas claramente y ademas ellas favorecen tu proximo destino...
ResponderEliminarQuien fuera capaz de encontrarse en ese estado de equilibrio como la protagonista de tu historia.
ResponderEliminarLa verdad es que nunca había oído la palabra Ataraxia -pero ya me enteré-.
Un placer recorrer tus estupendas letras de sosiego.
Un abrazo.
Ataraxia, una palabra extraña que, como algunos de vosotros, jamás en mi vida había oído hablar de ella, pero mi amigo-poeta, Agapxis, en el proyecto en común de palabras motivadas, en el que estamos sumergidos con mucha ilusión para crear poesía, me susurró debía ser mi palabra motivada Ataraxia para inspirarme en una entrada, entonces a mí, la verdad es que me sonaba a chino jajaja y lo primero que hice fue buscar en el diccionario su significado para comprender lo que era, a partir de ahí empecé a sentirla en mi interior para poder inspirarme en ella mientras la pensaba me producía paz, sosiego, equilibrio interior, hasta llegar a escribir la entrada sintiéndola desde la primera letra hasta la última, con sus espacios, sus comas, una sensación espiritual de relajamiento increíble, podéis hacer la prueba si queréis, ya veréis como os pasará lo mismo. Todo ello, debo dar las gracias a mi amigo y poeta Agapxis, por darme la oportunidad de invitarme a este proyecto en común de creatividad para la poesía o prosa, y que ya llevo escritas tres entradas: "Cómplice", "Ataraxia" y "Voluntad".
ResponderEliminarMil gracias siempre, amigo Agapxis por esta ilusión que tengo en crear poesía desde las palabras motivadas, parezco una niña pequeña ilusionada con zapatos nuevos jajaja.
Y mil gracias a todos cuantos estáis acompañándome día a día, gracias de corazón a todos.
Un beso enorme.
Me gusta..
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