A ti,
a quién le cuento mis confidencias más íntimas,
las preocupaciones que rompen mis sueños,
los desasosiegos que me dejan en vigilia,
las inquietudes que me desvelan,
desbordada entre lágrimas de cristal.
A ti,
a quién humedecida desnudo mi alma,
abrazadita sobre la dicha de mi felicidad,
entrelazada en suspiros alboratados,
ladeando mi cabeza por todos lados,
sollozando de placer al rojo vivo gimiendo mi aliento.
A ti,
a quién te respiro en cada segundo de mi noche,
acurrucadita embriagándome con los latidos sentidos,
temblando perdida con mi ingenuidad palpitando,
con mis ojos cerrados sintiendo tus besos,
y las pestañas enredadas entre las sábanas.
A ti,
mi cómplice almohada.
hay pocas personas a las que uno pueda hacer las confidencias más ímtimas. quizá alguien de la familia o algún amigo muy cercano. pero si, por el contrario, esa persona con quien puedes desnudar el alma, al mismo tiempo también desnudas el cuerpo y te unes a ella, entonces ya es perfecto. la suma del amor apasionado y la confianza absoluta.
ResponderEliminarexiste la expresión 'consultar con la almohada' cuando tenemos alguna preocupación. la noche es buena para poner las ideas en orden. también abrazamos la almohada cuando estamos enamorados. no hay duda de que es un apoyo.
espero que, en lo posible, no tengas motivos para derramar lágrimas. besos, maría!!
Cuántos secretos y sensaciones compartimos con nuestra almohada. Me encantó todo lo que escribiste en estos versos, preciosos como siempre.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Nadie tan cercano como aquel/lla ante quien puedes ser tu misma.
ResponderEliminarBesos
Ella cómplice callada de nuestras vicisitudes de vida, sufridora y compañera de cada una de las tormentas que nos ofrece la vida y que dulcemente acomoda nuestros sueños, ellas fieles sufridoras de nuestro confort.
ResponderEliminarPreciosos tus versos Maria.
Saludos y feliz semana.
es un honor leerte dia a dia . un beso andy
ResponderEliminarEntre tu almohada y mi sabana
ResponderEliminarLos sueños duermen....
Cuando el cansancio pesa en mis hombros, termino refugiándome en vos, en tu huequito conciliador de sueños, donde confieso lo inconfesable, lloro en tu compañía y rezo el agradecimiento de estar vivo.
ResponderEliminarA vos compañera y amistosa almohada, cajita de mis secretos, este beso es para vos, aunque alguna vez te haya besado pensando en otra.
Hermoso, me ha encantado.
Un beso inmenso
Juan
ResponderEliminar"a quién humedecida desnudo mi alma",
que apresurado me coloco a su sombra
la que provoca tu cuerpo, que,
incesante salpican sus más hermosos
lamentos, recogiendo los suspiros,
con los que desfogamos los versos.
Un beso
Ella la que lo escucha todo, el silencio los gritos del alma
ResponderEliminarella confidente como ninguna
bellas letras preciosa
Besos muy dulces
Confidente y amiga, la que escucha sonrisas y gritos ahogados del alma
ResponderEliminarBesos, preciosa
Bonito canto a tu querida confidente, a tu aliada, a tu cómplice!
ResponderEliminarMaría, un beso
Testigo silenciosa de las correrías personales, que nunca contará, pero que siempre te recordará.
ResponderEliminarUn beso.
Todos habláis con la almohada, ella os escucha y aconseja, voy a mirar la etiqueta de la mía, por si está fabricada en china y por eso no nos entendemos. Un abrazuco
ResponderEliminarLa que escucha en calma recogiendo la sal del pensamiento. En pastel pincelas esta noche, amiga mía y me lo llevo enredado en mis pestañas hasta mi confidente... mi almohada. Un placer leerte siempre, María.
ResponderEliminarA ti,
a quién humedecida desnudo mi alma,
abrazadita sobre la dicha de mi felicidad,
entrelazada en suspiros alborotados,
ladeando mi cabeza por todos lados,
sollozando de placer al rojo vivo gimiendo mi aliento.
Me encanta.
A ti que bebiendo la sal que destilo me acompañas en mis pensamientos, que acomodada en mi sueño susurras nanas calmando mis tormentas... a ti, por ti y para ti que abrazas mi insomnio.
Mil besitos, preciosa y felices sueños.
Bello homenaje a un fiel testigo
ResponderEliminarAbrazo
Es cierto, ya que ella es nuestra principal y directa confidente.
ResponderEliminarUn abrazo.
la almohada es una compañía que llevamos desde siempre y, aunque la cambiemos periódicamente, sentimos que sigue siendo la misma. su "personalidad" -por así decirlo- trasciende el tiempo y la textura con la cual está confeccionada y las personas le confían sus más íntimos secretos y fantasías.
ResponderEliminarbellas palabras las tuyas.
un beso.
Yo quiero una de esas almohadas, que dan besos :P la mía no lo hace :D
ResponderEliminarBesos con dulzura Mi Hada perlada.
Beautiful shot . . . the light, the form, the pose.
ResponderEliminarSo lovely.
A ti.
xo
Una generosa almohada que comparte todo....
ResponderEliminarAbrazo
¡Bello poema para algo a lo que quizás no damos importancia!
ResponderEliminarAbrazos.
Así es, María, poca compañía tan confidencial como ella. Es nuestro disco duro, ahí lo almacenamos todo.- Besos
ResponderEliminarMerecido y bello homenaje a la gran confidente, consejera y paño de lágrimas.
ResponderEliminarBss
Hola María. Qué bonito poema a la almohada que es nuestra compañera y quuien recoge nuestras lágrimas y quien sabe de nuestra felicidad y sueños en las noches.
ResponderEliminarSaludos y besos
Bom dia
ResponderEliminarGostávamos que actualizasse o nosso linke
http://anseiosedevaneiossexuais.blogspot.pt/
Beijoos doces
ay pero que bonito homenaje .. !!
ResponderEliminarella que abrazamos con tanta ternura , a veces, con tanta pasión otras, que se obra el milagro y el fino lino se hace piel y caricia
y ese blanco lienzo es el abrazo que necesitamos, la mano que seca lágrimas y el oído que escucha nuestros deseos, ..
esa almohada donde el rimel traza melancolías y el carmín la lujuria
......
habra que averiguar si hay un monumento .. grande o chico a ella, tan nuestra tan cálida , tan húmeda ..
Un beso y una sonrisa ( hoy por variar ) :P
Una poesía preciosa y tierna…
ResponderEliminarBesos, guapa.
Un precioso homenaje a la almohada que bien se lo merece por ayudarnos a dormir plácidamente.Besicos
ResponderEliminarY la almohada se ruborizó.
ResponderEliminarBesos.
Mi almohada y yo andamos siempre un poco dispersas. Eso sí, por las mañana, cuando nace el alba, nos abrazamos mutuamente... y nos dejamos llevar por el pensamiento.
ResponderEliminarPero ella es de la que dice que lo que yo no sé resolver, difícilmente lo hará ella, que también la pervierto y que, muchas ocasiones, la hago entristecer.
Bonito homenaje a quien guarda nuestra cabeza.
Un beso enorme.
A esa confidente que es la almohada. Con cuán lirismo le cantas y loas, que esta (la almohada) asume animidad. MI abrazo afecto. Carlos
ResponderEliminarTu almohada es una privilegiada...
ResponderEliminar; )
Un besazoooooo
Y seguramente la almohada no sólo es confidente, receptora de de lágrimas, algunas de felicidad, testigo de desvelos, producidos por tanta intensidad de emociones y sensaciones. Sino que seguramente será testigo de la sensualidad.
ResponderEliminarBesos.
PD: Te recomiendo que leas los relatos que escribieron alguno jueveros, sobre el tema que propuse. Algunos tal vez cercanos a tu estilo.
Más besos.
Nunca imaginé que se pudiera sentir celos de una almohada..., pero está visto que con vos, mi querida amiga, todo es posible...
ResponderEliminarEn vuestro caso, la voz aquella de "consultarlo con la almohada", se queda más que corta...
Muchos son los secretos que nuestras almohadas saben de nosotros...
Secretos alegres, otros tristes, sonrisas tontas y lagrimas saladas...
Quizás es que, como sabemos que no tienen boca con que contar nuestros miedos e ilusiones, nos permitimos ser con ellas más sinceros que con nadie...
Benditas sean, pues, las almohadas del mundo, y sobre todo aquellas que son capaces de hacernos sentir celos y envidias de ellas mismas...
Amén.
Si las almohadas hablaran y contaras todos los secretos…….esos suspiros….esas lagrimas….esas sonrisas…….. siempre permanecen fieles…..testigos mudos de sentimientos vividos….
ResponderEliminarA ti……una genialidad…….
Un beso enorme princesa…hoy con luna incluida…….y sin almohada…
hola que bonito,cuanto sentimiento
ResponderEliminarfeliz finde
besos
No hay mejor confidente, que silenciosa escucha y seca lágrimas...
ResponderEliminarUn abrazo
Fiel confidente de intimas sensaciones que solo se pueden compartir …con la almohada..
ResponderEliminarMe encanto María.
Un inmenso abrazo
sensual almohada que da semejantes sueños...
ResponderEliminary en ellos seguir soñando la vida...
Bendita almohada que nos regala sueños según nuestra necesidad.
ResponderEliminarMuy bueno.
Besos
Y bendita almohada la que me cobija, la que me refugia, la que me besa, la que me abraza, la que me escucha, me habla y más...
ResponderEliminarMuchas gracias amigos míos por vuestros preciosos comentarios, al final parece que con la almohada me quedé tan regazadita y cobijadita sin responder a cada uno de vuestros comentarios, lo hago de manera general, por falta de tiempo, por lo que, a todos, desde aquí, muchas gracias por vuestras huellas, y lo que he dicho antes, que con la despedida del verano, mi tiempo aquí es algo más escaso, por lo que, poquito a poquito, y como pueda, iré visitando vuestros blogs.
Mil gracias, de nuevo.
Muchos besos.
Esa almohada cómplice, que comparte suspiros, secretos, lágrimas y anhelos.
ResponderEliminaruna lluvia de besos
Muchas gracias, maduixeta, por todos tus comentarios, me encantó volverte a leer.
EliminarUn beso enorme.