Una vez que las tres azafatas mandaron a los pasajeros abrochar los cinturones de seguridad antes de despegar tierra, el avión fue tomando rumbo, y poco a poco, el piloto fue elevándolo al cielo hasta alcanzar la máxima altitud.
Poco después, cada una de las amables azafatas comenzaron a ofrecer a los pasajeros unos zumos y cafés...
Mientras que la tormenta iba tomando forma, un fuerte vendaval comenzó a azotar el vientre del cielo emborronándolo con un gran diluvio, por lo que, el avión empezó a desestabilizarse balanceándose de un lado a otro...
La cara de los pasajeros se transformó en auténtico pánico, algunos gritaban, otros lloraban, por lo que, una de las azafatas empezó a hablar desde el micro para intentar transmitir tranquilidad:
- ¡Por favor, señores pasajeros ruego mantengan la calma, solo se trata de una tormenta, no se levanten de sus asientos!
El tornado seguía azotando al avión, que comenzó a descender en picado... el piloto ya no podía controlarlo... uno de los motores dejó de funcionar... las luces se apagaron... la tormenta no cesaba... todo era ya un auténtico caos...
Las tres azafatas, aunque horrorizadas, seguían intentando transmitir calma a los pasajeros, que no cesaban de gritar atemorizados.
- ¡Ohhh noooooo nos vamos a estrellar!
De pronto, las compuertas se abrieron, los objetos comenzaron a volar, y una joven pasajera atemorizada salió disparada por el fuerte viento.... su móvil se cayó en el suelo del avión, el cual se podía divisar, a través de la pantalla del cristal, un mensaje de Whatsap que decía:
- "Estos son mis últimos minutos de vida por eso quiero confesarte algo que nunca te dije antes... lo mucho que siempre te he querido, mi amor... Te quiero hasta la eternidad".
Aquel avión maldito, que parecía estaba poseído por el diablo, se estrelló contra las montañas... la niebla de humo amortajó las vidas de aquellas personas... el destino de los pasajeros estaba escrito en el firmamento... desde aquella trágica noche las estrellas dejaron de iluminar el cielo...
De pronto, las compuertas se abrieron, los objetos comenzaron a volar, y una joven pasajera atemorizada salió disparada por el fuerte viento.... su móvil se cayó en el suelo del avión, el cual se podía divisar, a través de la pantalla del cristal, un mensaje de Whatsap que decía:
- "Estos son mis últimos minutos de vida por eso quiero confesarte algo que nunca te dije antes... lo mucho que siempre te he querido, mi amor... Te quiero hasta la eternidad".
Aquel avión maldito, que parecía estaba poseído por el diablo, se estrelló contra las montañas... la niebla de humo amortajó las vidas de aquellas personas... el destino de los pasajeros estaba escrito en el firmamento... desde aquella trágica noche las estrellas dejaron de iluminar el cielo...
He vivido este relato con tal intensidad que hasta he sentido el miedo terrible que supone el saber que el avión se iba a estrellar y yo cómo pasajera.Besicos
ResponderEliminarLa verdad es que produce escalofríos leer este tipo de relatos, el pensar que vas a viajar en avión y te puede ocurrir esto, es algo que da pánico.
EliminarUn honor que hayas sentido mi relato tan intenso, CHARO.
Besazos.
Según leía lo del mensaje de la chica, te juro que pensé que le iba a decir, cariño son mis últimos minutos de vida y quiero que sepas que ni un solo día en que hemos estado juntos te he sido fiel. Sería un puntazo, jajajajajajja
ResponderEliminarEl relato da escalofríos por lo real que es, tiene que ser algo tremendo esos momentos, minutos en los que ves que la vida se te va, nunca se sabe cómo se va a reaccionar ante esas situaciones hasta que no las vives, pero vamos, que yo miraría al rededor engancharía al tío más macizorro y le plantaba un beso en todos los morros ;)
La verdad que da escalofríos.
Un besazo, preciosa
Jjajaaj qué bueno hubiera sido que se me hubiera ocurrido lo que a ti dejando ese mensaje en los últimos minutos, hubiera sido la reoca jajajaaj qué verdad es, pero lo quise poner más romántico para que la recordara hasta la eternidad, sino de la otra forma la hubiera odiado jajaaj pero me encantó tu idea.
EliminarSí que es verdad que produce escalofríos porque puede ser tan real como la vida misma, el imaginarte allí arriba y que ocurra esto ... ¡buf! mejor no pensarlo porque sino me mareo jajajaja, prefiero pensar en lo que has dicho enganchar a un tipo de esos que están como un tren y así se olvidan los miedos jajajaajaj.
Un placer leerte, mi querida Prozac, me ha encantado tu comentario.
Besazos, preciosa.
Jo pues vaya mal cuerpo que se me ha quedado, no te creas!
ResponderEliminarBEsos
Ainsss siento que se te haya quedado mal cuerpo para otra vez escribo algo más apasionado, Buscando.
EliminarBesazos.
Não sei se história se realidade. Mas deu até pânico em ler.
ResponderEliminarUm beijinho
Pánico da pensar lo que puede ocurrir arriba en las alturas del avión.
EliminarBesos, Cidalia.
Te cuento por ser acorde a tu relato: El primer y último viaje en avión lo hice, de niño, de Madrid a Barcelona... tardaba unas dos horas y media...,. Me acompañaba "la tata"... la muy hija de puta (perdón) se pasó el viaje diciendo: ¡QUÉ NOS IBAMOS A ESTRELLAR!...,. Hecho, que quedó grabado en mi disco duro o cerebro. Nunca más he subido a un avión.
ResponderEliminar-
Una vecina y amiga (azafata) y un comandante de vuelo... también vecino. Un vuelo Madrid - Sevilla se estrellaron en el aeropuerto de Sevilla... y, murieron, TODOS sus ocupantes.
-
En Lucerna (Suiza) hay un museo dedicado a los trenes y aviones: Me subí en un avión de pasajeros que estaba anclado para ser visitado. Al poco tiempo... me bajé corriendo por si despegaba.
-
Tu bello relato me ha servido para desahogarme sin llegar al orgasmo.
-
Un beso, María.
Muchas gracias por compartir tus vivencias, amigo Eloy, en cuanto a lo que dices de tu primer y último viaje en avión, sí que es cierto que en la niñez se queda grabados los malos recuerdos e influye en la edad adulta, tal vez por eso que decía tu tata, cogiste pavor al avión.
EliminarSiento que tu vecina se estrellara en un avión, en accidentes de ese tipo no se salva ni dios, lo que ocurre que hay muchos más accidentes diarios en carretera que en avión, pero cuando ocurre en éste último transporte la salvación es cero.
De nuevo, te agradezco hayas compartido tus vivencias y te hayas desahogado, ya sabes que estás en tu casa y puedes comentar cuanto quieras para desahogarte, aunque sea sin orgasmo, todo viene bien.
Un beso.
Que historia. Es mejor no esperar un momento de peligro para confesar una verdad tan importante.
ResponderEliminarBien contado el relato.
Un gusto contar con tu participación.
Besos especiales
Muchas gracias, me alegra te haya gustado el relato, lo que pasa que como no es de mi estilo, erótico, pues a mí no me ha gustado tanto, pero es que esta imagen no me inspiró nada sensual, sino que me llevó por este cauce dramático, y al final para hacerlo un poco más romántico se me ocurrió escribir ese mensaje, pero bien cierto lo que dices, que nunca se debe esperar a un momento de estos para decir lo mucho que se quiere a alguien.
EliminarUn placer haber participado en el relato juevero siendo tú el anfitrión, siempre se te ocurren temas muy originales. Felicitaciones.
Besos especiales.
Impresionante la intensa inquietud que has dejado con tus palabras, mi bella alma gemela. Lo has narrado tan real que... Te felicito, María.
ResponderEliminarMil besitos y feliz miércoles.
Y con las imágenes que se va viendo cada secuencia parece mucho más real todavía.
EliminarMuchas gracias, mi bella alma gemela.
Besitos enormes y dulce noche.
Oh Maria,
ResponderEliminarLove that first photo.
Such sexy flight attendants.
I'm going to have to start flying more.
Mmmmmm.
xoxo
Parece que te ha gustado mucho la primera imagen con esas tres azafatas, ya sabes, amigo Rick, viaja de vez en cuando por los aires y tal vez te encuentres más azafatas que te den un zumito :-).
EliminarY esa expresión tuya de Mmmmmm me encantó, gracias por regalármela.
Besos.
Acordémonos de decir Te Quiero en momentos más relajados...
ResponderEliminarBesos
Pues sí que tienes razón, querida Milena, no hay que dejarlo para el último momento.
EliminarBesos.
cuando se produjeron los ataques del 11-s, dicen que la gente que iba en los aviones secuestrados mandaban a sus personas queridas mensajes de ese estilo. de todos modos, dentro de lo malo prefiero una catástrofe natural que un ataque terrorista.
ResponderEliminarpara ser piloto de avión hay que tener una capacidad de concentración y una sangre fría ante el peligro que pocos tienen. y para ser azafata, hay que tener paciencia con los pasajeros y saber transmitir tranquilidad en los momentos difíciles.
besos, maría!!
Qué terrible tuvo que ser lo del 11-S cada vez que lo pienso se me ponen los pelos de punta, no sabía lo de los mensajes, pues he tenido la misma idea, para que lo diera un aire más romántico a este dramático relato.
EliminarMaaamaaa mía yo no prefiero ninguna de las dos cosas, pavor me da, tanto el ataque terrorista como una catástrofe natural por los aires.
Y sí que tienes razón que para ser piloto de avión tienen que tener vocación, igual que las azafatas, y es que todos los trabajos tienen sus riesgos.
Besos, chema.
Tan bonito y a la vez tan triste. Supongo que todos haríamos lo mismo en ese caso, ¿verdad? Me ha gustado mucho leer tu relato, María.
ResponderEliminarDe que has llegado tarde, nada de nada: hay una entrada homenaje a una de las partes más eróticas del cuerpo humano publicada desde hace horas xD
EliminarNo quiero pensar que voy en un avión y ocurre eso, porque me pongo malita, y no se sabe cómo puede actuar uno ante esa situación tan trágica.
EliminarMe alegra te haya gustado mi relato, Holden, mil gracias.
Besos.
Vaya un despiste que no me enteré de tu nueva publicación, gracias por decírmelo acá, eres muy amable, aunque ya te leí tu respuesta en tu blog, por cierto, me gustó tu entrada dedicada a esa zona tan mmmmm erótica jajaja.
EliminarMás besos.
María,esta "de perlas". Saludos, Abrazo.
ResponderEliminarMe alegra te haya parecido que está de perlas aunque no lleve ninguna perla esta entrada nada más que mi firma jajaaj, gracias simpático.
EliminarUn abrazo, juan francisco.
Ay, estas cosas me ponen mala. Tiene que ser horroros morir así.
ResponderEliminarBesos, María.
No me extraña que te ponga mala este relato, es escalofriante y a la vez... ¡tan real!!!!
EliminarBesos, Celia.
A ver ahora quién se sube a un avión y le hace caso a las azafatas, jajaj, un abrazo.
ResponderEliminarNi de coña me subo en estos momentos jajajaaj, aunque mañana ya se me habrá pasado y encantada querré subir a un avión y además si hay unas azafatas así como ellas que realizan tan maravillosamente bien su trabajo da gusto estar a su lado porque te transmiten serenidad.
EliminarUn abrazo, Xan.
Si ya tenía pánico a los aviones, ahora lo tengo más…
ResponderEliminarHas creado un verdadero momento de angustia y desesperación… Entre tus letras, las imágenes, y ese mensaje que fue enviado antes de la tragedia que puso punto y final a sus vidas…ufsss…
El vello de punta, mi preciosa María…
Bsoss y cariños enormes!! ♥
Fíjate que yo he subido varias veces a los aviones y muy bien, además, me puse al lado de la ventana para ir mirando el paisaje jajaja pero no se me ocurrió pensar que puede ocurrir esto, es que si viviéramos pensando en todo lo malo no viviríamos, yo por lo general soy bastante positiva.
EliminarMe alegra te haya gustado el relato aunque se te haya puesto los pelos de punta, mi preciosa Ginebra.
Muchos besos con cariño.
Me ha resultado muy angustioso.
ResponderEliminarEso significa que has superado la prueba.
Besos.
Biennnn entonces estoy contenta de haber superado la prueba, Xavi, gracias, porque se que lo dices tal como lo sientes.
EliminarBesos.
Has creado con este relato un verdadero pánico a los aviones. Un abrazo
ResponderEliminarY es que puede ser una auténtica realidad, y también una pesadilla.
EliminarUn abrazo, María del Carmen.
María, te felicito porque has tenido temple y sangre fría al escribir este relato...Sé algo de aviones, sabes que mis hijos están fuera de España y en mi viaje a Australia fueron diez aviones en total( en mi viaje de ida y vuelta), porque también allí tomamos uno desde Brisbane a Sidney...Las turbulencias son de cuidado, sobretodo por la cantidad de horas (10 y 12 horas)en cada avión...En fin,aunque nos trataron muy bien, prefiero los viajes en tierra, amiga.
ResponderEliminarMi felicitación por tu reto conseguido.
Mi abrazo y mi cariño siempre.
Gracias por compartir tus vivencias mi querida amiga Mª Jesús, sí ya se que tus hijos están muy lejos y fuiste a visitarlos, la verdad es que es una exageración la cantidad de horas en vuelo que hay, yo nunca he volado tantas horas, lo máximo han sido dos horas, no más, pero si tuviera que volar tantas no se si no me entraría claustrofobia de estar tantas horas encerrada en un avión, tiene que ser pesadísimo.
EliminarUn honor para mí que te haya gustado mi relato tan escalofriante, y espero que no influya en ti para nada cuando tengas que viajar en avión.
Muchas gracias por tu presencia y palabras, querida amiga.
Un abrazo muy fuerte con cariño.
Un relato genial que no nos deja respirar mientras se está leyendo.
ResponderEliminarPensé que se salvarían.
Lo que me ha traído de cabeza todo el rato y hace tiempo que quería preguntarte, es como diablos consigues esas fotos tan apropiadas con el texto. No pueden ser casualidad. ¿cómo lo haces?
Eso tiene mucho mérito.
Un beso, María.
Esta vez mi relato fue dramático hasta el final, ni siquiera le puse una incógnita para que cada uno pensara un final, no, esta vez les maté a todos, hasta a las azafatas, pero quise dar un pequeño toque de romanticismo con ese mensaje para que no fuera tan escalofriante el relato.
EliminarPues te diré que primero escribí el relato y cuando lo terminé me dediqué a buscar las imágenes de acuerdo a lo que yo había escrito, es lo que más tiempo me llevó, el de elegir imágenes que fueran en consonancia con mi texto, pero al final me han quedado bien cosidas con mis palabras, la verdad es que no hay nada más, pero te agradezco mucho por apreciar lo que he hecho mi querida tecla, eres un sol.
Un beso enorme.
Hola María.. Un gran relato, muy expresivo, con final dramático, suerte que no tengo que viajar en avión próximamente, porque ya me veía haciendo testamento, por favor, el próximo jueves haz alguno que sea algo así como una resurrección.. mientras tanto viajare en tren..
ResponderEliminarUn abrazo juevero..
Hola, amigo llorenc, que aunque se que estás de fin de semana, yo te respondo para cuando regreses, espero que no te pille la lluvia como aquí que está lloviendo y está el día muy oscuro.
EliminarUn honor para mí que hayas visto mi relato así como lo describes, y me alegra por ti que tus viajes no los hagas en avión, "es mejor prevenir", porque allá arriba no se salva ni el apuntador, la muerte es más que segura a no ser que ocurra un milagro.
Tendré que pensar para el próximo jueves a ver qué relato hay que hacer para no pintarlo tan dramático jajaja.
Sí, a mí también me gusta más viajar en tren, pero sino también puedes hacerlo en bicicleta jajajaja no gasta gasolina, ni tampoco contamina jajajaja.
Un abrazo no ya juevero sino sabatino.
Un relato qué impresiona por su realidad y veracidad, con un final, muy triste, lamentablemente, me aterrorizan los aviones, la sensación del despegue me es súper violenta imposible de controlar y su aterrizaje también, si puedo, elijo otro medio de transporte.
ResponderEliminarUn besito, María, felíz semana, querida.
Parece que tú tienes mucho pánico a los aviones, mi querida Yayone, lo que pasa que a veces, no queda más remedio que elegir ese medio de transporte, aunque mejor no pensar en cosas negativas, no tiene por qué ocurrir siempre, hay más accidentes por carretera que en el cielo y no lo pensamos tanto.
EliminarMuy feliz fin de semana, preciosa.
Un beso grande.
Un viaggio tempestoso, che ha causato attacchi di panico fra i passeggeri
ResponderEliminarUn caro saluto,silvia
Aunque ha sido un relato también puede ser de lo más verídico, pero mejor dejarlo aquí y que no ocurra, silvia.
EliminarUn abrazo.
No me agradan los aviones y eso que he tenido suerte en todos los viajes que he hecho pero, tan solo pensar que me pudiese ocurrir algo parecido, no sé cómo reaccionaría, tiene que ser tremendo, en un caso así sabes que el fin lo tienes cerca, no se salva nadie.
ResponderEliminar¡Pánico me ha entrado al leerte!
Abrazos.
kasioles
La verdad es que viajar en avión es de lo más rápido que si tienes que viajar por carretera que te puedes tirar todo un día y en una hora con el avión ya llegaste, pero si pensamos en cosas malas no viviríamos, mejor no pensar en estas cosas tan dramáticas, que la vida también tiene cosas bellas, pero sí, es escalofriante este relato, pone los pelos de punta.
EliminarAbrazos cariñosos.
No se si mi corazón resistirá mas relatos si tienen este ritmo. Te quiero por si acaso no me da tiempo a mandar un WhatsApp. Un abrazo
ResponderEliminarJjajajaaj como me has sacado sonrisas, eres un sol, de verdad Ester, y yo también te quiero, y también te lo digo antes de que ocurran cosas malas jajajaaj.
EliminarUn abrazo inmenso.
Ay Dios debe ser terrible pasar por esos momentos trágicos. Te cuento que por ese temor hasta ahora he subido a un avión. Te imaginas? Lo intentaré de todos modos.
ResponderEliminarMe encantó tu blog.
Besos.
No quiero ni pensarlo, pero sí que tiene que ser horroroso pasar por esa situación, pero no siempre ocurre, no pensemos de manera negativa, y también encontremos sus ventajas al subir en avión.
EliminarMuchas gracias por tus palabras y por visitar mi blog, acomódate como si estuvieras en tu casa, y me encantará que vuelvas.
Muchos besos.
Impactaste hoy tus letras María, debe ser aterrador morir así, porque sabes que te vas...Besos!!
ResponderEliminarBuf, debe ser terrible saber que una se va de esa manera, escalofriante esa situación.
EliminarBesos, Rosana.
Muy bueno María vamos que he visto como caía en picado ajjajaj , imágenes espectaculares te hacen sentir el pánico .
ResponderEliminarMe gusto tu relato .
Un besoteeeeeeeeee grande grande.
Me alegra te haya gustado este relato tan trágico, y que hayas visualizado el cómo caía en picado, ¿no te has mareado? jajajajaaj.
EliminarUn placer tu compañía, mi querida Campirela.
Un besazo bien grande, preciosa.
Ooooh me ha encantado esta historia que nos cuentas con palabras e imágenes, muy buena entrada, que original y creativa,saludos y feliz semana amiga, espero sigas sorprendiendonos.
ResponderEliminarMuchas gracias, jesus, me alegra que te haya gustado esta entrada algo escalofriante, entre palabras e imágenes, un placer volver a leerte.
EliminarMuy feliz noche y besos.
Moraleja: Lo que tengas que decir, dilo, antes de que sea tarde. Bueno, bromas aparte, lo que yo destaco de tu relato, aparte de ser una composición de imagen y letra casi a partes iguales, vamos que más bien parece cómic que relato, es que, aún en su tragedia, en la muerte, es un canto a la vida, al amor. La vida son dos días y, lo mejor es que, llegado el momento, no tengamos que arrepentirnos de algo que no hemos dicho, que no hemos sentido. Triste, pero hermoso relato para estas fechas. Y por supuesto, un placer leer y ver en tu blog, amiga María.
ResponderEliminarComo puedes ver me he puesto bien al día, eh Espero seguir así, je, je. Y aprovecho para darte las gracias, también aquí, por tus lecturas a mis relatos y, más aún, por tus palabras.
Un beso muy grande
Jjajaja pues sí que esa sería la conclusión de esta entrada, esa moraleja con la que concluyes mi relato, lo debía de haber puesto al final jajaja, gracias por la complementación, no es broma, está genial, y es que en realidad, algunas veces actuamos así, cuando no queda más remedio demostramos nuestros sentimientos y no debería ser así.
Eliminar¿Y dices que te ha parecido un comic este relato? no he entendido bien por qué dices te ha parecido comic, porque yo he intentado hacer una tragedia, y así es como se palpa, lo que no se es cómo tú lo ves desde ese otro lado tan distinto, pero cada cual lo ve desde su mirada.
O tal vez haya sido lo del mensaje que te haya parecido más bien cómico, en realidad, fue a última hora que se me ocurrió dar ese toque romántico para que no fuera tan dramático el relato.
Ya veo que te has puesto al día en mis entradas, me has adelantado, un placer recibirte y leer tus comentarios, así como charlar contigo, sea de manera actualizada o retardada jajaja, siempre es grato recibirte.
Y también aprovecho para decirte que es un placer leer tus aventuras, cada una me transmite un sentimiento distinto, eso es porque eres un buen escritor, y además, te vuelvo a animar para que te decidas a publicarlos.
Muy dulce noche, amigo Isidoro y un beso enorme.
Que trágico relato has escrito, pero los riesgos siempre están ya sea por el clima o por fallas mecánicas o humanas. Mejor tierra firme.
ResponderEliminarBesos con dulzura Mi Hada Perlada.
Es que la inspiración de la imagen demiúrgica que elegí me llevó hasta ese extremo dramático desde los vuelos del cielo, Dulce Caballero, pero todo tiene su riesgo, lo mismo da sea por cielo que por tierra, incluso, bien cierto es, que por carretera hay muchos más accidentes que aéreos.
EliminarDulces besos perlados.
Me atraviesa el mensaje, en ocasiones esperamos hasta el final para decir lo que sentimos, lo que queremos o nos pasa, ¿qué sentido tiene?
ResponderEliminarBuen relato, María, un beso
Deberíamos expresar más los sentimientos y no dejarlos para última hora, cuando no queda más remedio que decirlos.
EliminarMe alegra te haya gustado mi relato tan escalofriante, la verdad es que a mí el tuyo me encantó por su originalidad.
Un beso, preciosa Ame.
BASTANTE DRAMÁTICO TU RELATO.
ResponderEliminarABRAZOS
Sí que es verdad lo que dices, amigo RelthiH, pone los pelos de punta.
EliminarAbrazos enormes.
Creo que has retratado una de las peores pesadillas de aquellos que alguna vez se han subido a un avión atravesando una zona de tormenta!... espero que nunca me pase algo parecido!
ResponderEliminarun abrazo
Yo también espero que nunca te pase nada de eso, Neo, ni a ti ni a nadie, que tan solo quede en este relato inventado, y nada más, porque solo de pensarlo es peor que una pesadilla.
EliminarUn abrazo, y me alegra que estés de nuevo entre nosotros.
¡Hola! He leído el relato y siento más razonable mi pánico a viajar en avión. Ha sido muy intenso y bien logrado.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Me alegra que te haya gustado mi relato Roxana, y no me extraña que tengas pánico de viajar en avión, si es que solo con pensar que puede ocurrir algo de esto bufff pone enfermo a cualquiera.
EliminarUn abrazo.
Que decepción!! Me esperaba un trio en las alturas....jajajajja mentira..es para quitar el dramatismo en tu relato y...la tristeza que me deja ese "te amare hasta la eternidad"...no debería quererse de esa manera..duele...muaaaaaaaaaaaaaaaa mi preciosa amiga...buena historia la que traes este jueves
ResponderEliminarIncluso un cuarteto pasajero-azafatas. No estaría mal para otro relato.
EliminarEso sin desmerecer el relato, que es de lo mejor.
EliminarBesos especiales, María Perlada.
Jjajaja gracias por sacarme sonrisas con tu buen humor y por quitar dramatismo a este relato, hiciste bien en poner ese toque de guinda picante y a la vez de humor, oye pues no estaría mal un trío en el avión jajajajaaj, sería de lo más erótico, me diste hasta ideas jajajaja que se yo sino se me ocurre algo de lo que dijiste para otra ocasión jajajaaj.
EliminarMe encantó tu comentario mi preciosa Diva, un placer leerte.
Un beso bien grande.
Buenoooo más ideas que tú también me das, Demiurgo, y no que sea un trío, sino un cuarteto jajaajaj, tres azafatas y un pasajero, qué buenas ideas eróticas me están viniendo a la mente por las ideas que me estáis dando jajaja, estaría genial buf pero lo mismo me censuran jajajaaj.
EliminarBesos especiales.
Muchísimas gracias por tus palabras, me alegra un montón que viniendo de ti, me digas que te ha gustado mi relato, no te imaginas cómo me inyectas energía para seguir escribiendo más, te lo agradezco en el alma.
EliminarMás besos especiales.
trágico desenlace. estoy seguro que aunque la gente no lo dice lo primero que piensa es si va a morir en pleno vuelo.
ResponderEliminarun beso.
Buf qué gran verdad ese pensamiento que te ha venido a la mente, es lo primero que se piensa al estar en las alturas, DRACO.
EliminarUn beso.
Buenos días, María:
ResponderEliminarEnhorabuena por tu relato: me ha atraído y sorprendido.
Por suerte el destino de esos pasajeros no está en manos del Destino, sino en las tuyas; estoy seguro de que ellos, al igual que yo, preferirán estar pendientes de tu capricho que de la voluntad de ese mal bicho.
Un abrazo, María.
Buenas noches, Nino, a estas horas ya:
EliminarMe alegra que te haya sorprendido mi relato, gracias por tu enhorabuena, lo agradezco mucho.
Qué razón tienes que el destino de esos pasajeros está en mis manos jjajajaaj y les llevé a la muerte de manera dramática, vaya qué traviesa fui jajaja, menos mal que se trata de un relato y todo es invención, como en las novelas, no siempre se acaba bien.
Un abrazo fuerte, amigo Nino.
Me he mareado ;)
ResponderEliminarBesos.
Jjajajaaj no me extraña en esas alturas y de esa manera volando jajaja mejor volar de otra forma distinta jajaja por cierto si quieres te traigo una tila.
EliminarBesos, Alfred.
uufffff me he quedado muerta me mantuvo tensa tu relato excelente como lo llevas y las imagenes fantásticas que acompañan tus imagenes , Enhorabuena amiguita te quedó genial, un besote desde mi brillo del mar
ResponderEliminarAins mi niña no te me quedes muerta que yo te quiero vivita y coleando para seguir leyendo tu poesía, y tus simpáticos comentarios siempre volando, esta vez sí que no volaste ¿eh?
EliminarGracias, preciosa, por tus palabras.
Besos, Beatriz.
Me ha parecido muy triste.
ResponderEliminarBesos.
Es que lo es, es un relato dramático, Fabián.
EliminarBesos.
Uff!!.
ResponderEliminarMuy bien conseguido el relato. Parece que estaba allí.
Què estrés !
Un abrazo !!!
Ay no, no quiero que estés allá, mejor estar aquí conmigo, que todo ha sido un relato inventado.
EliminarUn abrazo, Amapola.
Vaya angustia, qué terrible esos momentos y qué bien lo describiste.
ResponderEliminarTu relato hace pensar en que nunca sabemos cuál será el último momento y es mejor decir cada día a aquellos que queremos lo que nos importan.
Me ha gustado mucho la música que acompaña a la entrada ¿Quién es?
Un saludo y gracias por pasarte por mi blog.
Solo de pensar que tienes que subir a un avión y que puede ocurrir esto se te encoge el alma, es angustiante.
EliminarY así debe ser, como dices, cada día debemos demostrar nuestros sentimientos, y no dejarlo para el último momento, cuando ya no hay remedio.
Me encantó tu visita, Conxhita, muchas gracias por acompañarme.
Te diré que el vídeo es un regalo que me hizo una amiga, y por lo que se, es de una película, pero no la he vista, mira te dejo aquí referencias de la canción: Bound. Sarah Mclachlan - Answer, me alegra te haya gustado.
Muchos besos.
Muchas gracias Maria por la referencia, me ha gustado mucho así que apuntada está.
EliminarBesos
Gracias a ti por tu interés, preciosa.
EliminarUn placer tenerte, de nuevo, en mi rinconcito, Conxita.
Muchos besos.
Uf María menos mal que no voy a tomar un avión, por ahora, que tensión. Me gustó como lo has ido ilustrando con las imágenes, te quedó redondo.
ResponderEliminarBesos.
Un placer que te haya gustado la ilustración de las imágenes, San, y me alegra no tengas que coger ningún avión, yo de momento, tampoco, así que no corremos peligros por las alturas.
EliminarBesos, preciosa.
Buuuffff! es verdad mi querida MARIETA, como si estuvieras retransmitiendo en directo desde el avión ... si las montañas sirvieron de mortaja al pasaje al menos déjanos la esperanza de imaginar que hubo supervivientes ... así, al estilo de la peli VIVEN ... les damos por desaparecidos por ahora pero en un par de meses escribes otra entrada contándonos que tras sufrir mil vicisitudes ... la joven pasajera que salió por el aire y mandó un wasapp a su amor aterrizó en un nido de águilas que amortiguaron su caída y su novio que era bombero jajaja la encontró entre los polluelos de la última camada de aguiluchos ; )
ResponderEliminarMil besos preciosa...Las fotografias perfectas para ilustrar esta tragedia aérea
Como una fotonovela de verdad jaja MmuaaaaaaaaaaksS inmenso preciosa !!
Jjajajaaj qué grande eres, mi querida tocaya, cómo me sacas sonrisas, eres un cielo, cómo me ha gustado tu versión, siempre tan positiva, y con ese humor que te caracteriza, vales un potosí, de verdad jajaaj, y está genial tu idea, me ha encantado, así que nada, a pensar que quedan supervivientes, y a ver si dentro de unos meses se me ocurre otra entrada con alguna de tus ocurrencias jajajaja, me encanta como ves el lado positivo de las cosas, ya ves, el mío, en esta ocasión fue muy negativo, me cargué a todos jajajaaj.
EliminarMuchas gracias por tu comentario, por tu cariño, por tu buen humor, por ser como eres.
Muacksssssssssssssssssssssss enorme, corazón.
!Oh my goodness!
ResponderEliminarMe has impactado con el relato. Lo has descrito tan terroríficamente, que traspasas la zozobra de los pasajeros. Momento adecuado para una confesión. Menudo relato, Perlada. Me encanto.
Bso
Oye pues sí que tienes razón, que esos últimos instantes son para confesarlos pero delante de un sacerdote jajajaaj, para que les de la extremaunción jajajaja.
EliminarUn placer, mi querida Yessy que te haya encantado mi relato tan impactante.
Muchos besos.
Todo es viable y sensato, ya que la vida es un volar y volar y volar. Mientras los sueños sean realizables o no realizables, nunca debemos de dejarlos y menos que nos los roben mentes indeseables, capaces de tortura nuestras mentes para que sus aposentos viciosos atrapen nuestras mentes y jueguen con nuestros cuerpos. La luz intensa es la que preña nuestros cuerpos y deja fluir de la mente un caudal de nieve e incienso, lujosa mansión la de nuestra instinto y velada puerta que se abre y cierra ante la adversidad y la inconsciencia la que ya dominada, deja de fluir por nuestro corazón el que riega mi cuerpo y lo dúctil y maleable de hace fuerte a todos los sentimientos con la fuerza del amor el que debe regar nuestro cuerpo.
ResponderEliminarUn beso
Sí que tienes razón, amigo antonio, que la vida consiste en volar, no solo entre sueños, también viviendo las realidades, desde nuestras vivencias, unas veces cayéndonos y otras levantándonos, así estamos aquí, para saborear lo amargo y lo dulce, para latir entre emociones, pero también para saborear las lágrimas que nos dan las cosas negativas, amigo mío, me encantó tu prosa, siempre dejando una bellísima huella, mil gracias, Poeta.
EliminarUn beso.
Ya sabes lo que me ha subido hasta la garganta, leyendote.
ResponderEliminarBesos.
Siempre es un honor que lo que escriba lo sientas de una manera u otra.
EliminarBesos, Juan L.
Ja, por ahora me quedo en casa, no estoy en condiciones de despachar un entuerto.
ResponderEliminarAbrazo
Jjajaja, sí en casa corres menos peligro que volando jajaja.
EliminarUn abrazo, preciosa maría del rosario.
Uffff menos mal que no he de coger un avión en breve...
ResponderEliminarBesazo y buen finde!
Me alegra que así sea, Carmen, mejor por tierra, y si es en bicicleta, mucho mejor jjajaja.
EliminarBesazo y feliz tarde.
Querida, que texto más estrellado, aunque imaginé a las azafatas saltar en paracaídas y volar sobre la explosión.
ResponderEliminarQué bueno volver a leerte, mi querido amigo Juan Camilo, me alegra mucho, y sí que tienes razón, que es un texto de lo más estrellado, pero bien por imaginar a las azafatas en paracaídas lo mismo las salvaste.
EliminarUn beso enorme.
Hemos coincidido hasta en el final, sólo que el tuyo no deja el romanticismo a un lado noi en los momentos trágicos y el mío es más humorístico.
ResponderEliminarBesos.
Qué bueno que hayamos coincidido en la imagen, Tracy, me reí mucho con tu relato, con muy buen humor, el mío fue más trágico y con una chispa romántica.
EliminarBesos.
Inquietante. Personalmente lo habría trabajado con mayor cantidad de sensaciones, incidiendo en el pánico en sí mismo, si me permites humildemente este comentario. Felicidades, sigue escribiendo
ResponderEliminarEncantada de tu visita VICTOR, acomódate como si estuvieras en tu casa y espero disfrutes de mis textos.
EliminarMe ha encantado tu transparencia, me gustan las críticas constructivas, como te he dicho antes, porque me ayudan a crecer, gracias por tu sinceridad.
Un placer tu visita.
Un beso.
Qué excelente trabajo de producción, Perlada!
ResponderEliminarEs como una pequeña peli con todas las imágenes y todas las sensaciones.
Aplausos!
Un beso.
Qué bueno que te haya parecido como una película, me alegra te haya causado esa sensación.
EliminarEncantada de tu visita, mil gracias por tus aplausos que los recibo y guardo en la urna de mi corazón.
Un besazo.
Impresionante.
ResponderEliminarBesos.
Gracias.
EliminarBesos.
Conmociona tu relato juevero. Creas un clima de suspenso que el lector vive, y lo transide con el mensaje de "wasap" de la mujer a su hombre. Me atgrapó lo de los presagios, que me hizo acordar de la película con este título, basada en un cuento del Nobel colombiano, Gabriel garcía. Un abrazo, bela. Carlos
ResponderEliminarSí que, entre mis palabras y las imágenes trágicas todo ello hace que se nos pongan el corazón a cien y los pelos de punta, por eso intenté dar un toque de romanticismo al final para aderezarla con un poco de ternura.
EliminarQué bueno que te recordara a una película basada en un cuento de Gabriel García, que desconocía, gracias por mencionarlo.
Un abrazo enorme, amigo Carlos.
María, con el temor que le tengo al viaje en avión me ha estremecido tu relato, y con el agregado explícito de esas fotos le agregan dramatismo. Muy bueno el mensaje de amor antes de que el avión se estrelle. Es un toque que le da un poco de ternura a la tragedia. Tu sello indeleble se percibe en ese detalle.
ResponderEliminarUn relato fantástico, eres buena en todo lo que haces, una estrella.
Te mando un gran beso.
Ariel
Es cierto que las imágenes dan más dramatismo al relato, y algunas personas tienen pánico al avión, entre ellas, veo que tú, espero no lo hayas cogido más manía ahora al leer mi relato, no es lo habitual que ocurran accidentes aéreos, suele haber más accidentes por carretera, lo que pasa que al pensar que se está ahí arriba da mucho más miedo que no se salva nadie.
EliminarMe alegra te haya gustado el mensaje de amor del final, así aderezado con algo de ternura resulta un pizca menos trágica.
Muchas gracias por llamarme estrella, qué bonito nombre, nadie me había llamado así.
Un beso enorme, amigo Ariel.
Molto vicino alla realtà questo drammatico articolo
ResponderEliminarBuon inizio di settimana e un saluto,silvia
Un relato bastante dramático, allá en las alturas, silvia.
EliminarMuchas gracias, igualmente, que tengas una estupenda semana.
Besos, preciosa.