No recuerdo...
no comprendo...
no me entero...
ni entiendo...
ni sé dónde estoy...
ni sé quién soy...
ni sé quién eres...
Para eso estás tú...
para hacerme recordar...
para hacerme entender...
con el calor de tu amor...
con tu paciencia...
con tu compañía...
con tu abrazo...
Necesito de ti
para seguir viviendo,
pero no sufras por mi conducta,
ni nunca dejes de quererme.