Otras palabras latidas: Jose

Llegamos al último protagonista de la sección "Otras palabras latidas", la cual ha sido el premio para cada uno de los once participantes que se lanzaron conmigo a la piscina: Lluis, Campirela, Prozac, Agapxis, Ester, CHARO, Cora, Ginebra, Auroratris, Ivel y Jose, a quiénes, nuevamente, vuelvo a agradecer de corazón por acompañarme, dando por concluida esta sección.

A partir de la semana que viene y durante ocho viernes estará presente la nueva sección "Entrevista Perlada a ...", como premio opcional para los participantes en la "Iniciativa de los Homenajes" que son: Albada, Ame, Emy, Ginebra, JLO, Juanky, María (yo) y Vicente, que han aceptado gustosamente ser entrevistados, y a quiénes agradezco porque a través de las preguntas que les haga, incluida yo, nos desnudaremos un poquito más para que nos conozcáis, espero también os sea igualmente interesante que la sección que finaliza.

José se lanzó a la piscina con una entrada que me encantó fotografiándose con su cámara, y gracias a ello pude descubrir quién hay detrás de sus sensuales letras, para lo cual, le doy las gracias por acompañarme a dicha aventura.

A José no hace mucho que le conozco, aunque exactamente me ha resultado dificil averiguar desde cuándo, porque no comenta habitualmente en mi blog, pero lo que importa no es el tiempo, sino disfrutar de su agradable compañía cada vez que está presente en este rinconcito, como yo en el suyo, "Letras de mi pluma", el cual cada vez que voy disfruto de sus sensuales poemas, y como muestra él nos ha dejado un precioso texto en prosa sobre la piel, toda una sinfonía envuelta en intensa sensualidad, pero para descubrir más de sus letras os recomiendo visitéis su blog.

Mil gracias, José por acompañarme en la iniciativa de la piscina y por compartir esta preciosa sinfonía en la piel, que me ha encantado, es un honor para mí que hoy seas protagonista en mi blog.

Mi gracias, José, por acompañarme

Sinfonia en la Piel

Ella deja que las manos recorran su cuerpo como siempre ha fantaseado. Dejando que la seducción doblegue a la razón entregándose a esas sensaciones que genera el piel contra piel.

Él reacciona a cada caricia, escuchando esa melodía que sale del cuerpo mientras aquellos labios comienzan a interpretar el preludio de un deseo incontrolable.

Su  lengua afinada en el tono perfecto, hace vibrar la espalda en un perfecto acorde. La intensidad alcanza para desencadenar la armoniosa entrada de su pecho sobre él y sentir un coro de latidos que desplazan la sangre preparándose para el desarrollo de una sinfonía inolvidablemente apasionada.

El sudor invade el momento, su monte de Venus se prepara cual el cuero de un timbal, esperando ser embestido al compás precioso para regalar su mejor interpretación.

Su cuerpo se tensa en la medida justa, vibrando suavemente, aumentando la tensión, la intensidad y el tempo de la interpretación. La humedad inunda la escena preparando un clímax intenso.

Cada parte de su cuerpo armoniza cual orquesta con sus cueros, vientos y cuerdas.

Toda la intensidad se desata en una carrera alocada donde la fuerza, la emoción y la pasión se funden en una explosión, una convulsión, un abrazo y un te amo.

José