No se si será porque se acerca el Día de Todos los Santos o por qué será. El caso es que últimamente sueño con mi madre, algo que antes no hacía. Ahora ella viene a visitarme alguna que otra noche. Y se mete en mis sueños. En ellos, ella está viva. Me llama. Me habla. Me mira. Me sonríe. Me acompaña. Yo la siento tan real como si estuviera conmigo. Pero al despertarme y ver que se trataba de un sueño, me hace sentirme algo triste y nostálgica.
Las calles por donde paseábamos sienten su ausencia, están frías. El hogar sin ella no es el mismo hogar. Está vacío. Porque nadie puede llenar su hueco. Ella era la generosidad en persona. El calor del cariño. Todo amor y resplandor. ¿Cómo no echarla de menos?
No sé qué significarán estos sueños que, últimamente, se repiten tan constantes dentro de mí. ¿Tal vez ella me quiere dar algún mensaje? ¿o es que desde dónde está me sigue dando fuerza y protección?
Sea cual sea, lo cierto es que, mi amor por mi madre es incondicional. Mis emociones están vivas, como así la siento a ella. El hecho de que no esté presente no significa que mi amor haya muerto. Creo que todo lo contrario, ha crecido aún más.
Pero es algo que no se demuestra llevando unas flores al cementerio en un día concreto. No. El amor que siento hacia mi madre lo siento cada día del año dentro de mí. En mi corazón. En mi mente. En mis recuerdos. En el legado de sus genes. En mi casa. En la calle. En el aire que respiro. En mis viajes. A donde quiera que vaya. Ella está conmigo. Porque mi madre siempre será mi hogar.
No hay mejor definición que esa: una madre siempre es el hogar.
ResponderEliminarBesos
Así es, una madre es el todo, y cuando se nos va, el hogar queda vacío, porque ella es el hogar. Nuestro hogar. El amor y lo más grande.
EliminarMuchas gracias, Daniel, por tu compañía, que tengas una feliz tarde.
Besos.
Precioso.
ResponderEliminarBesos.
Gracias, Devoradora de libros, un gusto que estés aquí acompañándome.
EliminarQue tengas una feliz tarde.
Besos.
Entiendo que tengas esos sueños, significa que es emocionalmente importante para vos, que tu madre te ha dejado huellas. en vos.
ResponderEliminarY tal vez quiera seguir acompañándote.
Besos y un especial abrazo.
Eso parece, Demiurgo, que mi madre no se ha ido de mi lado, después de más de tres años que falleció, ella está más cerca que nunca conmigo, es ahora cuando la sueño, y en mis sueños, siempre aparece viva, por eso creo que me quiere transmitir un mensaje, o protegerme, creo que los sueños algo deben de significar, y en este caso, mi madre se adentra a mis sueños.
EliminarMuchas gracias por siempre estar.
Besos especiales.
Entiendo perfectamente lo que has escrito porque mi relación con mi madre es exactamente igual que la que tu describes, incluso las sensaciones que percibo ahora que ella n está, son similares.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte.
Me alegra mucho, Tracy, que tengas las mismas sensaciones, porque es cuando de verdad podemos comprender a los demás, cuando nos ocurren hechos similares, es más fácil ponerse en el lugar de la otra persona, y yo ahora estoy contigo, y te comprendo perfectamente, esa relación que tienes con tu madre, como yo tengo con la mía, desde los sueños, aunque es algo que antes no me había ocurrido, pero últimamente, son constantes.
EliminarMuchas gracias por tu compañía.
Un abrazo inmenso.
Hoy más que nunca no sabes cómo te entiendo y me emocionan tus palabras, María... Una madre siempre es y será amor y hogar. Muy bonito y sentido.
ResponderEliminarMil besitos para ti y muy feliz tarde ♥
Una madre se debería escribir en mayúsculas, porque es la persona más amorosa y generosa que existe en la vida, todo lo da por el bienestar de sus hijos, y ella nunca nos abandonaría, jamás lo haría, por eso mismo, ella no se ha ido, se queda en nuestro corazón para siempre, por eso se siente viva, en nuestra mente y en nuestros latidos. Una madre es hogar. Y nunca rompería su hogar. Por eso ella sigue viva.
EliminarMuchas gracias por tus palabras, Auroratris.
Besitos enormes y feliz tarde.
A nossa Mãe ou o nosso Pai, vivos ou mortos, vivem sempre dentro do nosso coração.
ResponderEliminar.
Cordiais saudações
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Pensamentos e Devaneios Poéticos
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Así es, Ryk@rdo, nuestro padre, nuestra madre, siguen vivos, los llevamos con nosotros, es un amor incondicional para siempre.
EliminarQue tengas una feliz tarde.
Un abrazo.
Abrazos Poetisa...
ResponderEliminarOtro abrazo para ti, Chante.
EliminarLa madre siempre está en nuestro interior.
ResponderEliminarBesos.
Así es, Alfred, siempre la recordaremos, la llevamos en la cajita de nuestro corazón, y siempre permanecerá, no solo en el día de todos los santos, sino cada día. Siempre.
EliminarBesos.
Querida María, he leído con atención tu relato que refiere a tus sueños con tu amada madre, que en paz descanse. Me parece normal que se sueñe, cuando uno ha tenido una madre tan fina, tan cariñosa, tan cercana a uno, con ese ser querido, pero, también me parece, que al tener con nosotros a ese ser que se fue tan abruptamente de nuestras vidas, que lo mantenemos en nuestros pensamientos, en nuestras nostalgias, entonces, es normal, repito, que soñemos con la persona que fue parte vital para nuestra existencia. Yo creo que eres tú la que traes a tus sueños a tu madre y será siempre así, por mucho tiempo. Los seres humanos procesamos de maneras distintas nuestras perdidas, yo perdí en los últimos tres años a mi hermano menor en un accidente brutal y, en este año, a mi padre... el dolor ha sido muy duro, pero casi no sueño con ellos, creo que he soñado un par de veces, no digo que ya he superado el duelo, pero intento, seguir mi vida porque tengo que ser fuerte, porque no se puede hacer nada y mis hijos y toda mi familia me necesitan fuerte. Te entiendo, querida amiga, pero intenta aceptar, de a poco, que tu madre vive el sueño eterno y que ya ella no sufre más. Tú podrás seguir amando a tu madre, llevarla en tu corazón todos los días del año y allí estará viva y contigo y, de esa manera, será natural que la sueñes porque tú siempre la estarás buscando en tus sueños, pero, acepta la realidad y vive porque lo demás es sufrimiento.
ResponderEliminarAmiga, recibe un fuerte abrazo y un beso.
Qué bonito tu comentario, Gustavo, muchas gracias por tus palabras, sea como sea, el caso es que a mi madre la llevo conmigo, no solo de día, que también la sueño de noche, pero viva. Y en estos días que son tan familiares, es cuando más se siente ese vacío. Y como bien dices, en realidad, ella vive en el sueño eterno, donde no se sufre, y donde está en el descanso eterno. Así que lo mejor es aceptar la muerte como parte de la vida, ya que todos nos tendremos que ir, tarde o temprano, aquí nadie se va a quedar, pero sea como sea, es inevitable echar de menos a los que se fueron, y más si tuvieron con nosotros una relación tan estrecha.
EliminarUn abrazo enorme y felices días.
Algo tienen de especial, seguro...
ResponderEliminarUn abrazo.
Una madre en sí, es un ser especial, Rafael.
EliminarUn abrazo y felices días.
Me encanta tu metáfora de que una madre es un hogar. Precioso. El resto de sentimientos que expresas son dolorosos y profundos. Saludos,María.
ResponderEliminarAsí la siento yo a mi madre, mi hogar, y si ella no está, encuentro un vacío enorme, y más en estos días, que se van acercando a la navidad.
EliminarUn abrazo, cuantocuento,castelo y felices días.
Somos la cadena de transmisión de nuestros antepasados y juntos caminamos por la vida, nuestros padres viven en nosotros. Como no soñarlos.
ResponderEliminarUn beso.
Nuestros padres siguen en nosotros, nos dieron la vida, y nosotros fuimos su fruto de amor, ahora nosotros llevamos su recuerdo en el corazón, Ángel, imposible no soñarlos.
EliminarUn beso y felices días.
Me emocionam as tuas palavras querida Maria!
ResponderEliminarUma Mãe ou um Pai, estarão sempre acima de tudo.
Verdadeiramente, eles são a origem, a luz que sempre ilumina os nossos caminhos!
Besos para ti!
Una madre es una estrella que la llevamos en el corazón, para siempre, por eso mismo, imposible olvidarla, porque ella nos dio la vida, nos dio amor, y ese amor lo llevamos grabado en cada latido del corazón, A.S..
EliminarBesos y felices días.
Precioso María, un homenaje hermoso. Por muchos años que pasen siempre estará contigo y la sentirás porque ella sigue cuidando de ti. Yo ya hace algún tiempo que dejé de sentirla porque literalmente su energía se hacía presente en algunas fechas. Cada día me acuerdo de ella a pesar de que han pasado cincuenta y siete años que se fue. A las madres se las quiere durante toda la vida aunque ya no estén en el hogar. Mi abrazo enorme Dulce María, Sigue soñando con ella porque así la sientes como si aun estuviera a tu vera y alarga los sueños para disfrutar del momento.
ResponderEliminarBesos
Muchos años que se fue tu madre, en cambio, tienes a tu padre, que le cuidas y está presente en tu vida, ójala que te dure muchos años, y puedas disfrutar de su compañía todo lo que no pudiste disfrutar de tu madre, Isa. Mi padre hace muchos años que se fue, también me acuerdo de él, pero lo de mi madre está más reciente, y la siento viva, dentro de mí, tanto es así que la sueño viva.
EliminarMuchos besos y felices días.
ResponderEliminarHasta mis sentidos han llegado tus letras por donde paseo de la mano de mi madre, aquella mujer sencilla siempre cargada de niños unos que la arropaban y otros llevados en sus brazos.
Serpentean las serpientes a través de las ondas de la noche y los calamares dejan que su tinta se expanda por las aguas de los ríos…Luce hoy mas intensamente los recuerdos que nunca están dormidos… ya que el tiempo es como un suspiro y hoy abren las heridas de mi cuerpo y se posa en mi alma su recuerdo… Sí, esa madre que lo dio todo y sufrió mas que lo que los seres humanos estamos acostumbrados a sentir. Siempre aferrado a su mano entre trenes y caminos, entre pueblos desconocidos, dejaba su cuerpo aterido de frio, por las hordas de una infinita deshumanización que le tocó vivir.
Suenan los clarines de la nostalgia y dejo mi mente que se deje llevar por los caminos de cabras y becerros y caballos y burros… donde quedo su cuerpo malherido y su mente sin abrir por los avatares de su lúgubre e incierto caminar por su noble existencia.
Pero sigue viva en mi recuerdo sintiendo su dolor en mi mente y su amor vencido entre seres que se dejaron la vida en su propia contienda, donde la marginación poblaba la de ella y todas las mujeres de su clase.
Un abrazo y gracias por tus palabras.
27.1021
Es que una madre es una estrella, se la siente, aunque no esté presente, ella está en nuestra mente, en nuestro corazón, y más en estas fechas que se acercan. Gracias por tus bonitas palabras, tan sentidas y tan poéticas, Antonio.
EliminarUn abrazo y felices días.
Las personas que nos aman y amamos siempre viven en nuestros corazones. Desde que vi "Coco" el día de Todos los Santos ha cobrado un sentido diferente ;) Quizás ahora también creo en los fantasmas que nos protegen.
ResponderEliminarUn besazo, María
No he visto esa peli que mencionas. Pero tal vez tengas razón, Dafne, los fantasmas hasta puede que nos protejan, está au aura, su huella, aunque no se les vea.
EliminarUn beso enorme y felices días.
Bello mi querida María, y como bien dices las fechas que se acercan nos recuerdan mucho más si cabe a los que ya no están con nosotros. Una madre es le hogar sin duda alguna ella lo crea para todos los miembros de la familia. Como te entiendo y comparto contigo todo tu escrito. Sobran las palabras. Un beso con todo mi cariño... disfrutemos de tus letras. muakssssssss
ResponderEliminarA veces, no hace falta decir muchas palabras, cuando sobran, como dices tú, pero se sienten desde el corazón, y es que una madre es la luz que nos alumbró para darnos vida, y sigue siendo luz después de muerta.
EliminarUn beso enorme, mi Campi, y felices días.
Um texto belo e sedutor!
ResponderEliminar*
Enquanto eu sentir esta força de viver
*
Beijos e uma boa noite!
Muchas gracias, Cidália.
EliminarBesos y felices días.
Como me coge de paso suelo entrar todos los días en el viejo cementerio en mis paseos matutinos. Y de paso hacerles una visita.
ResponderEliminarBesos
Si te pilla de paso y te sienta bien ir al cementerio, haces bien. Yo la verdad es que no suelo ir, nada más que algún día especial.
EliminarBesos, Erik, y felices días.
Siento lo mismo por mi madre. Podría decir que hasta la veo algunas noches, ya sé que suena a locura pero es así.
ResponderEliminarMi madre era y es mi pilar de apoyo.
Y ella está conmigo.
Un beso grande. Precioso texto.
Así es, preciosa, ella está contigo, está en tu corazón, la llevas contigo, por eso la sueñas, porque la sientes viva, igual me pasa a mí, no es locura, es sentirla viva.
EliminarUn beso enorme, Moony, y felices días.
El amor de una madre por sus hijos es el sentimiento más puro y desinteresado que conozco. Yo aún tengo la suerte de tenerla, con sus 96 años.
ResponderEliminarMientras estés tú para recordar son tanto cariño a la tuya, seguirá viva.
Muchos besos.
Me alegra que aún tengas a tu madre, disfruta todo lo que puedas de su compañía, que cuando se nos van, parece que nos falta un mundo, y es que, como bien dices, Macondo, el amor de una madre es el más desinteresado, el más grande. Yo la echo mucho de menos. Cada día más.
EliminarMuchos besos y felices días.
qué bonito texto dedicado a tu madre. como te decía en facebook, si aparece en tus sueños es que está muy viva en tu recuerdo.
ResponderEliminarhablas del amor incondicional. efectivamente, hay personas a las que amamos sin condiciones, sin esperar nada a cambio y sin pedir que actúen de una manera determinada.
besos y abrazos, maría!!
Es cierto, la siento viva, y últimamente, sueño con ella, viva, parece que su recuerdo me hace compañía, y es que una madre no te das cuenta del valor de su cariño hasta que se va. Tú también la tienes, disfruta mucho de su compañía, Chema, todo lo que puedas, que una madre es algo muy grande.
EliminarBesos y felices días.
Que bonita similitud María, tu madre es tu hogar, me ha parecido bellísimo. Un abrazo y felicidades por este relato/historia
ResponderEliminarAsí es, así la siento, mi hogar, y aunque se haya ido, sigue estando en mi corazón y en mi recuerdo. Por cierto, qué guapa estás, Ester, en la foto que ha hecho Neo.
EliminarUn abrazo y felices días.
Hola María, un relato muy emotivo, el amor que se siente por una madre no pasa jamás, se mantiene vivo en el corazón y concuerdo contigo, la madre es un hogar.
ResponderEliminarBesazo guapa y feliz descanso.
Cuánto se la echa de menos cuando ves que no vuelve más. A veces no te lo llegas a creer, pero no queda más remedio pensar que la vida es así, y que todos nos iremos. Así es, Paula, una madre es hogar.
EliminarMuchos besos y felices días.
Intenso y emotivo relato en el que el amor de madre es el protagonista, venciendo incluso a la muerte. Te entiendo y comparto ese vínculo con la mía, también ausente desde hace diez años. Un abrazo
ResponderEliminarBien lo sabes, acerca de ese vínculo, Neo, con una madre, que aunque se nos vaya, sigue estando, y ellas siempre serán nuestras protagonistas en nuestro corazón y recuerdo. Enhorabuena, Neo, te han quedado genial las fotografías, eres muy creativa.
EliminarUn abrazo y felices días.
María hay sueños de sueños; pero, uno con nuestra propia madre es más que especial: el más original de todos ellos.
ResponderEliminarUn abrazo.
Nuestras madres en nuestros sueños porque ella son unión y corazón que laten en el nuestro, no se pueden ir jamas, Guillermo.
EliminarUn abrazo y felices días.
es cierto, los muertos se comunican con uno a través de los sueños.
ResponderEliminartu relato me hizo recordar mi experiencia personal con mi madre fallecida. ella se me aparecía en sueños para prevenirme de algún problema que iba a ocurrir indefectiblemente durante el día. y claro, como yo no podía prever qué es lo que iba a suceder, durante el día me la pasaba muy atento y teniendo mucho cuidado de cualquier cosa.
al parecer, los muertos saben el destino de cada uno de sus seres queridos pero no pueden alterarlo interviniendo directamente para que cada uno pudiera evitarlo.
como lo anterior me pareció una especie de tortura, le dije a mi madre que no se detenga por mí y que siguiera su camino (quizás a una nueva reencarnación).
creo que me hizo caso porque ya no la sueño.
el problema ahora es que es mi padre fallecido quien se me aparece en sueños, pero no para prevenirme de problemas futuros, sino todo lo contrario, para anunciarme con su visión que algo bueno me va a ocurrir durante el día.
igual. un día de estos le voy a decir que también avance, que siga su camino, y que no se detenga por mí.
besos.
Muy curioso lo que me cuentas, DRACO, yo también creo que es cierto que los muertos nos anuncian algo que va a ocurrir, bueno o malo, que nos avisan, que están ahí velando por nosotros como estrellas desde lo más alto, que nos protegen. Yo así siento a mi madre. Y tú que también soñabas a tu madre, para anunciarte de alguna cosa, aunque ya veo que no la sueñas, ahora es a tu padre, son temporadas, tal vez, ahora necesites de él y que su visión te aporta bienestar, pero lo cierto es que nosotros no los traemos a nuestros sueños, son ellos los que se adentran para estar en nuestra compañía.
EliminarGracias por contarme tu experiencia, DRACO.
Besos enormes y felices días.
me emociono cuando pienso en mi madre, soy totalmente parcial en mi cariño a ella y por mucho que la pueda querer nunca devolveré su amor por mi, siempre me reprocho que no la quise todo de lo que era capaz de querer. Ella era y es el hogar, su calor y un ejemplo para querer a mis hijos, por que para ellos somos su recuerdo Un abrazo
ResponderEliminarAlgunas veces así nos podemos llegar a sentir también los hijos, pensando en que no las quisimos tanto como ellas a nosotros, pero lo cierto, es que cada uno ama a su manera, unos lo demuestran más que otros, porque son más expresivos y cariñoso, pero no por ello quiera decir que quieran más.
EliminarUn abrazo y felices días, Rodolfo.
Asi es María. A mi me pasa igual con mi padre, además en estos días, también viene la fecha de su cumpleaños. Lo añoro muchísimo y como tú dices, era mi hogar. Te mando muchos besos cariño, y un fuerte abrazo, no solo en estos días, siempre. Besos :)
ResponderEliminarSe les echa mucho de menos, sobre todo, a quién haya fallecido más recientemente, como en el caso de mi madre, que aunque hace ya unos años, pero está mas reciente que la muerte de mi padre, que hace bastante que murió, aunque también hay momentos en los que me acuerdo de él.
EliminarMuchos besos y felices días, Margarita.
Que bonito Maria, yo perdi a los dos ya hace 16 años, sin esperarlo de golpe.
ResponderEliminarse como te sientes, estan con nosotros, eso lo se...
Yo era joven aun y hoy en dia recuerdo imagino como serían
en no haber podido compartir tantas cosas de nuestras vidas con ellos.
Hay aque amarlos estar ser, cada segundo con ellos y quienes nos aprecian.
Porque no duran para siempre y como dicen de un dia a otro
nadie sabe, tanto en papas como en amistades, en todo en si
Besitos
Es duro ya en sí cuando pierdes a uno de ellos, pero en tu caso, que los perdiste tan seguidos a los dos, es durísimo, Cora, además, eras muy joven, y has disfrutado menos con ellos, aunque los recuerdos son los mismos, pero al fin y al cabo, mi madre murió ya de mayor, y agradecer a la vida por ello, cuando ves otros casos tan duros, como el tuyo, lo siento mucho, Cora, tus padres, te guiarán, ellos son tus ángeles, que te acompañan, y los llevas en tu corazón siempre.
EliminarBesitos enormes y felices días.
muy hermoso texto ... lindo para leer en este día
ResponderEliminarMuchas gracias, Ricky, que tengas felices días.
EliminarUn abrazo.
Estoy de acuerdo contigo. Soñamos con quienes amamos pero son ellos los que quieren aparecer para decirnos que están ahí, velando por nosotros o, como ejemplo, para aclarar cosas que no se aclararon en vida.
ResponderEliminarLa madre es el mejor hogar del mundo.
Un beso.
Estoy de acuerdo contigo, Mag, son ellos los que se adentran en nuestros sueños para acompañarnos, para decir que siguen con nosotros, así siento a mi madre, su compañía, desde donde ella se encuentre, la llevo en mi corazón y en mi recuerdo.
EliminarUn beso y felices días.
Ese cordón que nos une y aunque esa ausencia física nos duele: pero esta la otra la emocional, que es exclusiva de cada uno: los sentimientos de cada persona y esos afectos también.Yo perdí la mía hace poco y la verdad que estas fechas son tristes: pero en mi caso con mi padre: que hace mucho tiempo :posiblemente porque al ser más joven sus consejos con alguna reprimenda : muchas veces cuando reprendo a mis hijas creo que hablo con el...
ResponderEliminarPreciosos recuerdos María: al fin y al cabo lo que hoy somos se lo debemos a ellas.
Es verdad que la fecha de los finados mueve muchos sentimientos y más con este azote de la pandemia que no es para menos.
Un ramillete hecho de un abrazo grannnde guapisima
Qué bonitas tus palabras, Bertha, tienes razón que es un gran cordón que nos une, y se les echa de menos y más aún en estas fechas, que se remueven los sentimientos, pero hay que seguir, no queda otra, y aunque el tiempo cura las heridas, no los recuerdos que siempre los llevamos con nosotros, y así los sentimos cerca.
EliminarBesos enormes y felices días.
Ayer vi en Facebbok esta entrada y la leí, me pareció muy emotiva y me recordó a mi madre. Yo no soy de cementerios pero siempre hago un recordatorio virtual al panteón donde están enterrados mis psdres y en mi casa les pongo flores y unas velas a sus fotografías en el día de los difuntos.Besicos
ResponderEliminarIgual que yo, que no soy de cementerios, pero hay fechas especiales en los que nos sale del corazón acudir allí, aunque los recuerdos los tenemos en otros sitios más cercanos.
EliminarBesos y felices días, CHARO.
Es una auténtica preciosidad esta declaración de amor hacia tu madre, con la que no puedo estar más de acuerdo.
ResponderEliminarGracias María, besos.
Muchas gracias, Fernando, me alegra que te haya gustado esta entrada nacida del corazón.
EliminarBesos y felices días.
Hola, María.
ResponderEliminarA mí me sucede lo mismo desde hace semanas, es un sueño recurrente en el que mi madre parece que intenta ayudarme o prepararme para una situación que aún no se ha presentado.
Suelo despertarme siempre con una sensación de tristeza.
Besos!
Borgo.
Parece que a ti te ocurre también, Miquel, y a más gente, eso es que nos avisan de que algo bueno nos va a suceder, es lo que presiento, así que felices de tenerlos cercanos, y que nos sigan protegiendo.
EliminarBesos y felices días.
Todo aquello que mencionas al final de tu relato, hace un buen hogar y puede que el mejor de los hogares sea finalmente el que llevamos dentro y allí a quienes queremos por siempre.
ResponderEliminarBesos dulces María Dorada.
Así es, el mejor hogar es el que habita nuestro corazón, allí llevamos a nuestros seres queridos, en la cajita del corazón.
EliminarBesos y felices días.
Madre sólo hay una.
ResponderEliminarBesos, María.
Y además son amores especiales, Sa Lluna.
EliminarBesos y felices días.
Ellos no mueren María, viven siempre en nosotros, en nuestros recuerdos, en nuestros hábitos sobre todo cuando nos lo enseñaron, eso es así, es la vida, pero estos días quizás se acentúen mas por las fechas que se acercan, yo tampoco soy de cementerios, no suelo ir, respeto por supuesto todo , todos los gustos y tradiciones.
ResponderEliminarFeliz tarde.
Un Abrazo.
Así es como bien dices, José Antonio, ellos no mueren, porque siempre están con nosotros, los llevamos en el recuerdo, y los sentimos vivos.
EliminarBesos y felices días.
Pues creo que has dado en el centro de la Diana. Donde este la madre como centro de gravedad de la familia, todo gira alrededor de ella.
ResponderEliminarBesosss Maria
Qué bonito lo has dicho, Gabiliante, cuando te refieres al centro de gravedad de la familia, así es, más exacto imposible.
EliminarBesosss y felices días.
Siempre es un placer leerte mi querida María. Un relato precioso. Nuestros seres queridos habitan en nosotros por siempre.
ResponderEliminarUn abrazo enorme lleno de cariño.
Elloos habitarán siempre en nuestro corazón, no se van, mi querida Rita, un placer tu compañía.
EliminarUn abrazo inmenso y felices días.
Hola Maria.. Me ha emocionado ese recuerdo incondicional a tu madre, es bonito sentir como las personas se acuerdan, quieren a su madre, quizás eso sea lo que mantiene la confianza en los seres humanos.
ResponderEliminarUn abrazo y buen y largo fin de semana.
Es que son palabras nacidas del corazón, y así las has sentido, es un amor incondicional como bien dices, Llorenc, cómo se las echa de menos, da igual la edad que tengan o tengamos.
EliminarUn abrazo y felices días.
También tuve un tiempo que esos sueños que se repitieron, noche tras noche. En cuanto a lo demás, totalmente de acuerdo. Nunca la olvidaremos y nos acompañará siempre.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Parece que estos sueños se han repetido a muchos de nosotros, es porque siguen con nosotros, se les siente cercanos aunque se hayan ido.
EliminarMuchos besos y felices días, LA CASA ENCENDIDA.
El vínculo entre una madre y sus hijos son así de poderosos, existen más allá de la ausencia física y no es necesario el cliché de las flores, ellas saben que su amor vive en esos recuerdos y en cada cosita que de ella se rememora.
ResponderEliminarHermoso texto!
Besos!!
Así es, es un vínculo muy fuerte, el que nos une madres e hijos, y su ausencia es tan solo física, pero se las recuerda tal como eran, su voz, sus gestos, sus actos, imposible olvidar.
EliminarBesos y felices días, Etienne.
Es curioso.
ResponderEliminarHace días que sueño con gente fallecida.
Será por las fechas?
Besos.
Tal vez sea por las fechas, así lo creo yo también, TORO.
EliminarBesos y felices días.
Hay personas que son casa, que son hogar.
ResponderEliminarY nunca cambia, ni el amor que sentimos ni la medida en que las queremos.
Dulces sueños, bonita.
Personas que son hogar, porque así las sentimos en el hogar del corazón.
EliminarBesos enormes y felices días, Laura.
Hace siete años que murió mi madre y aún me sorprendo pensando: se lo diré a mamá... y es que aunque partan quedan tan adentro...gracias por compartir, besos.
ResponderEliminarQué gran verdad lo que dices, MOLÍ, aunque se vayan, siguen con nosotros, es tan fuerte la unión y los recuerdos tan entrañables.
EliminarMuchos besos y felices días.
Precioso para la que puede decir eso de la madre, no fue mi caso. Y es así, los que se han ido, viven en nuestro recuerdo y no es necesario que sea en un día señalado. Los llevamos dentro, además.
ResponderEliminarBesos, María
Vivirán para siempre con nosotros, no dejan que se vayan , viven en nuestros sueños y recuerdos, Myr.
EliminarBesos y felices días.
lindo relato nuestro hogar esta con quien amamos aunque ya solo sea un recuerdo. Te mando un beso
ResponderEliminarTal como lo has dicho, J.P. aunque sea en el recuerdo.
EliminarBesos y felices días.
Mi querida amiga, no dejes de sentir ese amor, el hace que la distancia que marca el tiempo se achique, que tus recuerdos sigan recientes y que tu amor por ella nunca se agote.
ResponderEliminarUn beso.
El amor por mi madre no se ha ido, sigue en mi corazón, por siempre en mi vida, por eso la siento tan cercana, así es, Agapxis.
EliminarUn beso y felics días.
A veces nos dejan su aroma y el calor de ese hogar, pero sobre todo nos dejan su esencia.
ResponderEliminarUn placer leerte
Besos
Qué bonito lo has dicho, Charly, un placer leerte.
EliminarBesos y felices días.
Las madres, en general, son insustituibles y únicas.
ResponderEliminarBesos
Así es, tal como lo has dicho, Luis Antonio.
EliminarBesos y felices días.
Pues tienes unos dulces sueños amiga María, y ciertamente tu madre está presente y te protege. No dejes nunca de sentir el amor que sientes hacia ella.
ResponderEliminarUn gran abrazo amiga y buen fin de semana.
Siempre conmigo, a mi madre siempre la llevo cerquita, ella me guía, es mi ángel protecto, unjardinsostenible.
EliminarUn abrazo enorme y felices días.
Cómo te comprendo! Me has emocionado con este hermoso relato. El vínculo de la madre con los hijos no se pierde ni con su fallecimiento...mientras le recordemos, siguen con nosotros, "viven" con nosotros...
ResponderEliminarMe cuesta entrar en tu blog, ni idea del motivo.
Besos.
Espero que ya puedas entrar fácilmente a mi blog, no sé a qué será debido, pero ya sabes, que a veces, los duendecillos son traviesos por estos lares, Franconetti.
EliminarBesos y felices días.
En mi caso, hace ya veinte años que la perdí y a veces sueño con ella. La vida y la enfermedad, en su caso son inexorables y la pérdida está siempre presente, como también lo está el recuerdo vivo, que queda en nuestra mente y a veces en los sueños.
ResponderEliminarUn beso, María.
Ya veo que la perdiste hace tiempo, casi tanto como mi padre, ya veintidós años, pero se les recuerda igualmente, en cambio, mi madre, está más reciente, tres años, y parece que fue ayer, porque la tengo siempre presente.
EliminarBesos y felices días, Juan Carlos.
Hola perla entre perlas.
ResponderEliminarEse sueño tuyo es suerte de muchos, yo entre ellos, de las dos disyuntivas que propones, las dos valen. Ellas lanzan el mensaje de "estoy aquí para cuidar de ti"... muchos besos.
Por si te quieres pasar:
https://arenaysalweb.wordpress.com/2021/10/28/por-las-canteras-de-camino/
Eso creo yo, creo que mi madre me está diciendo que aquí sigue para cuidarme y protegerme, que no me ha abandonado, por eso está presente en algunos sueños, y además, viva.
EliminarUn abrazo y felices días.
El hogar es algo físico muchas veces, pero otras, como en eso tan bonito que has escrito, es un recuerdo, una sensación cálida a la que queremos volver cuando el mundo se nos vuelve demasiado incomprensible...
ResponderEliminarEs cierto lo que dices, no es lo mismo hogar físico, que hogar humano, el hogar del cariño y recuerdo, el que siempre permanece.
EliminarUn abrazo, Beauséant, y felices días.
Los sueños son para reafirmar quiénes somos, aunque nosotros no lo sepamos, ellos no lo dudan.
ResponderEliminarSaludos,
J.
Algo significarán los sueños, tal vez, nuestros deseos, o nuestros miedos.
EliminarUn abrazo y felices días, José A.
Un relato precioso y lleno de sentimiento, me ha emocionado mucho.
ResponderEliminarUn beso María.
Muchas gracias, preciosa, Dakota.
EliminarUn beso y felices días.
mães são eternas em nossos corações e sempre estão conosco. Creio na vida após a morte, isto reconforta um pouco, bjs
ResponderEliminarEs verdad, las madres son eternas, no mueren nunca, Jeanne.
EliminarBesos y felices días.
Encantador texto, María. Está lleno de amor, de sueños, de nostalgia, de cariño...
ResponderEliminarMe encanta tu manera de expresar esos sentimientos hacia tu madre de esa forma tan bonita e intensa.
Yo creo que amamos cuando tenemos a nuestros seres queridos, y tal vez más cuando no están, porque se agrega el echarlos de menos.
Los sueños son eso, una manera de seguir amándolos y echándolos de menos, y también una manera de recordarlos como están en ese recuerdo, vivos.
Gran homenaje a tu madre. La verdad es que en el cementerio no hay nadie, sólo ceniza, por eso yo tampoco llevo flores ni hago visitas innecesarias. Esos seres queridos, o mejor dicho la energía que fueron, sus almas están en otro lugar más bonito que las tumbas.
Un beso gigante.
Qué bonita tu manera de pensar, José Luis, y estoy de acuerdo en lo que dices, que en este caso, el cariño se duplica porque está el recuerdo y los sueños, y es una manera de sentirlos más cercanos, como si no se hubieran ido de nuestro lado. Me alegra que te haya gustado este homenaje a mi madre.
EliminarBesos enormes y felices días.
Hola María.
ResponderEliminarUn privilegio soñar con tu madre. Ahí la tienes contigo. Te acompaña en tus horas de descanso a través de los sueños. Te protege, allá donde estés con todo su amor y cariño como madre que siempre seguira siendo.
Un enorme abrazo.
El caso es que antes no la soñaba, es últimamente, parece como si me avisara de algo, tal vez, me esté protegiendo, y me dirija el camino.
EliminarUn abrazo enorme y felices días, Mónica.
Precioso relato, siempre es agradable soñar con las personas que quieres y ya no están físicamente entre nosotros, el amor incondicional por una madre es eterno...
ResponderEliminarUn saludo.
Es una manera de sentirlos cerca, como si no se hubieran ido, así que yo encantada de soñar a mi madre viva.
EliminarUn abrazo, Guillermo, y felices días.
Maria
ResponderEliminarla sueñas porque esta con vos, siempre que la necesites te visitara de una manera en que no temas, el cuerpo es un embase y la esencia del alma viaja cada tanto a darnos un abrazo, o solo para saber que esta.
un abrazo
Qué bonito lo que dices, bella, es cierto, es para sentir su abrazo, y la esencia de su alma que está cerca de nosotros.
EliminarUn abrazo y felices días.
Suena y es muy hermoso que un ser querido sea nuestro hogar
ResponderEliminarBesoss
Así es, Don Dunas, una madre es el hogar más hermoso.
EliminarBesos y felices días.
Bien lo dice tu relato, el amor por la madre ausente no es cosa de flores y visitas a la tumba. Debe sentirse en el hogar que se compartió, y que mejor de apreciarla en los sueños, a pesar de que al despertar sea eso: sólo un sueño, pero qué grato, tierno soñar a la madre. Un abrazo. Carlos
ResponderEliminarSí que es cierto, que resulta muy grato soñar a la madre sobre todo, cuando la ves viva, es como si estuviera cerca y no se hubiera muerto, así que la sentimos más cercana.
EliminarUn abrazo y felices días, Carlos.
Te leo despues de haber ido a visitar a mi madre a otra ciudad. Ella estaba y esta delicada de salud, pero haber ido a su encuentro y poder rememorar unas cosas llenan el alma, son cosas que reconfiguran. Como bien dices hay personas que son un hogar y de los que uno no nunca se va.
ResponderEliminarTe envio un gran abrazo.
Qué suerte que tienes a tu madre, y has estado con ella, seguro que serás mejor que su medicina cuando te vea, porque a su edad y en su estado de salud estar cerca de los hijos es lo que más desean porque se dan cuenta que se les va la vida, Xabo, disfruta de ella.
EliminarUn abrazo enorme y felices días
Hola Maria.. Los seres queridos siempre, siempre estarán presentes a nuestro lado. La muerte no se lleva a los seres amados. Al contrario, los guarda y los ennoblece en la memoria.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me ha parecido haberte respondido más arriba, Llorenc, así que si ha sido así, gracias por tu doble visita. Muy bonito lo que dices que se los ennoblece en la memoria.
EliminarUn abrazo y felices días.
Emocionante y bello relato el hogar no está completo sin nuestra madre, pero ellas estan en todos los rincones como lo están en el corazón siempre las sentimos cerca. Precioso !! Un beso enorme.
ResponderEliminarNuestras madres son el todo, y cuando se van quedan un vacío irreemplazable, que no se puede llenar, Hanna.
EliminarUn beso enorme y felices días.
Cuantas cosas me quedaron por decirla. Cuantas caricias que regalarla. Ese te quiero que jamás salió de mis labios. Ya hace 30 años de su ausencia. Actualmente tengo 48 y la sigo sintiendo en mi interior. También la sueño como tu. También la añoro. Que bonitos recuerdos de mi niñez. Gracias por tu aportación.
ResponderEliminarMuchas gracias, David, por tu entrañable comentario, te agradezco tu visita, y que hayas compartido tus emociones, que me hacen reflexionar porque a mí me pasa igual, que alguna vez pueda pensar, cuántas cosas me han quedado por decirla o por demostrarla más mi cariño.
EliminarUn abrazo y felices días.
Una madre que se va deja un hueco inmenso. Una madre es ese ser incondicional que pase lo que pase siempre estará a tu lado.
ResponderEliminarHas escrito con el corazón y con ella dentro de ti.
Besicos ❤😘😘😘
Qué bonito lo que me dices, Galilea, que he escrito con el corazón y con ella dentro de mí, muchas gracias por tus entrañables palabras y por tus comentarios. Así es, está escrito con cada latido de mi corazón.
EliminarBesos enormes y felices días.